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Secundarios obtienen amplio apoyo político y doblan la mano al Gobierno

Demandas de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios han concitado adhesión del mundo político y la sociedad civil, lo que ha obligado al gobierno a flexibilizar su posición frente a una protesta que se extiende por todo el país. La incógnita está planteada para el próximo lunes, día en que se deberá definir en el Mineduc quiénes serán los interlocutores para mesa de diálogo.


En el transcurso de la mañana de este viernes los estudiantes secundarios agrupados en la ACES darán a conocer su nuevo cronograma de movilizaciones, luego del amplio apoyo que han concitado sus demandas en el mundo político y la sociedad civil. Así lo confirmó uno de los voceros de la asamblea César Valenzuela, alumno del Colegio Confederación Suiza, luego del encuentro que sostuvieron este jueves en el internado Barros Arana.



El respaldo y crecimiento que ha tenido el movimiento obligó incluso a que el Gobierno a cambiar su estrategia frente a las tomas y paralizaciones que se extienden como un reguero por todo el país.



Este miércoles el Ministro de Educación (Mineduc) Martín Zilic había señalado que invitaba a todos los estudiantes, que no estuvieran movilizados, a sentarse en una mesa de diálogo el próximo lunes. Sin embargo, un día después señaló que aceptaría a todos los alumnos que estuvieran en una actitud pacífica, pese a que seguía considerando la toma como un mecanismo extremo de presión.



«Lo que nosotros hemos dicho es que no queremos actos de violencia, y eso los padres lo han apoyado absolutamente. Incluso, nos han comentado que en los colegios los jóvenes están pintando, haciendo reflexión. Si eso es así, con esos jóvenes vamos a conversar y dialogar», afirmó, siguiendo de esta forma el planteamiento que hiciera la mañana de ese mismo día la Presidenta Michelle Bachelet en orden a que es necesario "reformar" el sistema educativo.



Apoyo político de peso



Pero así como el conflicto se ha extendido, también lo ha hecho el apoyo político que inicialmente dieron los senadores PS y DC, Camilo Escalona y Soledad Alvear, respectivamente, a la movilización que pretende obtener la derogación o modificación de la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza (LOCE) y la Jornada Escolar Completa (JEC), entre otras demandas que incluyen, además, PSU y transporte escolar gratuito.



El respaldo también lo brindaron los diputados oficialistas de la Comisión Educación: Carlos Montes (PS), Carolina Tohá (PPD), María Antonieta Saa (PPD) y Gabriel Silber (DC), quienes llamaron a introducir "urgentes" modificaciones a la LOCE.



Asimismo, la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), Católica (FEUC), Tecnológica Metropolitana (UTEM), y de Santiago (Feusach) entregaron su pleno respaldo al pliego de peticiones que también, en algunos de sus puntos, han enarbolado en años anteriores.



«Un gobierno participativo no se entiende como uno que cinco meses antes de la elección define su programa, y nunca más lo discute, sino que está abierto a que los problemas que han emergido, como el de los secundarios, se resuelvan", señaló Nicolás Grau, presidente de la FECH, quien es hijo de la titular de la titular de la Segpres, Paulina Veloso.



Asimismo, el presidente del Colegio de Profesores Jorge Pavez se plegó a los secundarios y planteó que su gremio, al igual que los universitarios, no descartan movilizarse si es necesario de no conformarse una mesa de alto nivel, como ha sucedido con la establecida para modificar el sistema electoral y previsional.



Pavez ironizó y dijo que «el ministro de Educación es médico, y él sabrá que hay situaciones que tienen que ser resueltas con urgencia. Esta es una situación de extrema urgencia, por lo tanto, como médico debe entender que debe partir corriendo, tal como si hubiera una operación. De lo contrario, la persona que está muy grave, que es la educación pública chilena, se va a agravar. Nosotros no queremos que muera, queremos que viva", sostuvo.



Tampoco estuvo ausente de esta verdadera "catarsis" de adhesiones el presidente de la Cámara de Diputados, Antonio Leal, quien fue más allá y discutió los cambios que los estudiantes quieren realizar a la LOCE en el Liceo Manuel Barros Borgoño, donde alguna vez estudió.



En tanto, este viernes el Partido Comunista (PC) se referirá al tema, al igual que el ex Ministro de Educación, Sergio Bitar, y se sumará a la paralización el primer colegio particular, el Altamira, de Peñalolén.



El problema que se viene



Pero no todo será "color de rosa", ya que el próximo lunes deberá conformarse la mesa de diálogo y, según supo este medio, se anticipa un difícil sinceramiento donde todos querrán plantear sus puntos de vista en una mesa con espacios reducidos.



Lo complejo de la situación será cómo resolver el punto de la representatividad. En definitiva, saber quiénes serán los interlocutores válidos del movimiento estudiantil ante el ministerio. En la cartera saben, por lo pronto, que los jóvenes de la ACES maneja una política de horizontalidad, donde no hay presidente, pero sí cuatro voceros. Y la organicidad con que ellos se generan no está muy clara, menos aún cuando expresan a sectores políticos muy dispares que van desde el PC hasta la UDI.



Lo particular de esto es que en el Mineduc ven que muchas veces los voceros no tienen real representación gremial en sus colegios y son más bien elegidos por el grado de opinión y la capacidad de elaborar un discurso público que manejan. De igual modo, la asamblea agrupa principalmente a colegios de Santiago, unos 30, pero no a todos. La incertidumbre es qué pasará con los alumnos de los colegios denominados "periféricos", que no tienen dirigentes familiarizados con el roce mediático, como sí los poseen los llamados establecimientos emblemáticos.



Fuentes del gobierno sostienen que el conflicto de ha "contaminado" por la presencia de un sinnúmero de actores que se han ido subiendo al carro de la movilización secundarios, pero que la problemática, en alguno de sus puntos, ya había sido planteada por el Ministro Zilic al comienzo de su gestión.



Recuerdan que éste señaló oportunamente que había que abordar los problemas derivados de la municipalización heredada de la dictadura militar y la necesidad de hacer la "reforma de la reforma" como lo detalló a un vespertino. Es decir, para el gobierno los temas estaban ya en la agenda de trabajo, aunque se sorprendieron con la virulencia del estallido del conflicto, el cual no fue abordado y seguido por la administración anterior.



En ese sentido, recordaron que los secundarios presentaron sus demandas en un informe, en el que trabajaron seis meses, el 30 de noviembre de 2005. Sin embargo, éste quedó archivado sin entenderse la relevancia que tenía para el futuro de la educación pública.





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