Sandor Mulsow, académico del Instituto de Geociencias de la Universidad Austral, que culpó directamente a Celulosa Arauco por la tragedia ambiental en el río Cruces, fue designado miembro de de la International Seabed Authority (ISA), entidad que tiene por finalidad regular la utilización de los recursos mineros presentes en el fondo del océano.
El académico del Instituto de Geociencias de la Universidad Austral de Chile Sandor Mulsow, fue designado miembro de la comisión técnica-legal de la International Seabed Authority (ISA), organismo dependiente de Naciones Unidas, que tiene por finalidad regular la utilización de los recursos mineros existentes en aguas internacionales.
El nombramiento de este científico chileno al interior de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos -en español- se produjo tras la participación de éste en la asamblea ordinaria que se realizó en Jamaica el mes pasado, al que llegó gracias a una invitación de la Cancillería.
En la actualidad existe una alta preocupación por el destino de los recursos presentes en el fondo del mar, ya que hay una fuerte presión por parte de algunas potencias de explotarlos.
Al respecto, el año pasado la Federación Rusa y Alemania quisieron conseguir, vía licitación, algunas áreas de prospección y explotación. No obstante, la solicitud les fue negada por la ISA debido a la inexistencia de un reglamento que estableciera el marco ambiental en que se debían realizar las intervenciones.
Reglamento objetado
Dicho reglamento finalmente fue redactado y casi es aprobado en la reunión de agosto, sin embargo, Mulsow se opuso a su promulgación porque en éste todavía no se consideraban todos los aspectos ligados que garanticen la segura extracción de metales como el platino, cobalto, cobre y cerio, que se encuentran en estado prácticamente puros, cualidad que les permite tener un alto valor en el mercado. El platino, por ejemplo, tiene un valor por kilo de 2 mil 800 dólares.
"Me opuse (al reglamento) porque estimaba que habían por lo menos tres recursos marinos que desde el punto de vista geológico tienen diferentes orígenes, tienen diferentes texturas, y por lo tanto, hay tres maneras de extraerlas, no es con la misma máquina. En definitiva, lo que queremos los países chicos es darnos tiempo para poder investigar el fondo del mar". indicó Mulsow.
"Si van a sacar nódulos de manganeso, que se utilizan para microchips y cerámicas ¿qué tipo de tecnología van a usar? necesitamos saberlo. Una vez que tú sacas un nódulo, nunca más los recuperas. Por ejemplo, uno de cinco centímetros de diámetro, tarda varios millones de años en crearse, ya que crecen a una tasa de 4,6 milímetros por millón de años. En consecuencia, tienen un valor económico y científico, porque está toda la historia del océano ahí adentro", agregó.
El científico explica que además de los metales citados anteriormente, también hay otros muy apetecidos y que se encuentran en abundancia en Chile: las costras de fierro y manganeso que están presentes en las montañas submarinas.
"Por eso necesitamos que empiece a existir en nuestro país un Codelco de minería submarina. ¿Por qué? porque en nuestras doscientas millas no tenemos idea dónde están los recursos. Hay una persona en Valparaíso que pescando otras cosas encontró un par de costras, pero no hay ningún estudio sistemático", sostuvo.
En ese marco, el académico del Instituto de Geociencias anunció que uno de sus objetivos, de aquí a mayo del próximo año, es concientizar al Gobierno para que adopte medidas del punto de vista de la protección de estos recursos.
En contra de Celco
Sandor Mulsow estuvo en el centro de la polémica hace algunos meses, tras publicar un estudio en el que responsabilizaba, sin mayores rodeos, a la planta Valdivia de Celulosa Arauco y Constitución (Celco) de la crisis en el santuario de la naturaleza del río Cruces, en la Décima Región.
Según su teoría, el alto nivel de sulfatos presentes en los residuos industriales líquidos (riles), ayudó a disminuir la concentración de bicarbonato, elemento que al estar ausente inhibe la fotosíntesis y causa la muerte del luchecillo (Egeria densa), planta acuática de la cual se alimentaban los cisnes, especie que vio mermada su población luego de la instalación de la Celulosa en la zona.
__________
