El próximo 30 de septiembre deberían dejar de operar estas instancias especializadas, cuyos procesos pendientes deberán ser asumidos por los tribunales de Familia. Sin embargo, ante un eventual colapso de estas magistraturas, la Corte de Apelaciones de Santiago planteó la necesidad de prorrogar nuevamente su cierre.
El Pleno de la Corte de Apelaciones de Santiago se pronunció a favor de retrasar el cierre de los juzgados de menores, previsto para el 30 de septiembre, luego de que el año pasado se prorrogara en un año el traspaso de las causas que acoge esta instancia a los recién creados tribunales de Familia.
La decisión se adoptó en base al número de causas pendientes en el antiguo sistema y la existencia de una enorme cantidad de pleitos en los juzgados de Familia, lo que podría provocar un colapso de estos últimos. Esta situación ya fue advertida la semana pasada por la ministra de la Corte Suprema Margarita Herreros ante la comisión de Constitución del Senado.
Los juzgados de Menores deberían haber desaparecido seis meses después de la entrada en vigencia de la nueva justicia familiar, que comenzó a operar en marzo de 2006. A pesar de ello, el máximo tribunal logró demorar un año su cierre, en virtud del importante número de causas pendientes.
Sin embargo, la situación no ha variado desde entonces por lo que, según los magistrados, sería recomendable prolongar el funcionamiento de estas instancias especializadas.
La resolución del tribunal de alzada ahora debe ser analizada por el Pleno de la Corte Suprema, que probablemente también recomendará extender el funcionamiento de los juzgados de Menores, teniendo en cuenta también el informe entregado por la jueza Herreros a los parlamentarios.
Número de jueces
En tanto, el lunes se reunió la comisión de Constitución del Senado, oportunidad en que se aprobó en general el proyecto de ley que introduce modificaciones orgánicas y de procedimientos a la ley que creó los tribunales de Familia.
Sin embargo, las diferencias se presentaron con respecto al número de funcionarios solicitados por el Poder Judicial y los propuestos por el Ministerio de Justicia.
El senador Alberto Espina (RN), quien subrogó la presidencia de la instancia especializada, señaló que mientras el Poder Judicial indicó que necesitaba un mínimo de 353 jueces de familia "para terminar con la UTI de estos tribunales", el Ejecutivo señaló que sólo bastaba con 258.
En cuanto a los funcionarios, la Corte Suprema esgrimió aumentarlos a 1.868, mientras que el Ejecutivo a sólo 780 y respecto a los juzgados mixtos (familiares y laborales), el Poder Judicial solicitó 15 tribunales de este tipo, mientras que el Gobierno sólo planteó la creación de cinco.
Ante las diferencias, el senador señaló que lo más probable es que la Alianza rechazará el proyecto en la Sala, porque no estarán dispuestos a aprobar una legislación que no garantice que estos tribunales no colapsarán.
En cuanto a la prórroga de los juzgados de Menores, señaló que el Ejecutivo se comprometió a despachar en las próximas semanas un proyecto con carácter de urgencia que extienda el funcionamiento de estos tribunales.
Consultado si se contemplará el plazo de un año como la vez anterior, indicó que no existe un pronunciamiento concreto por parte del Ejecutivo, pero que de todas maneras se realizará de manera gradual.
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