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Con hallazgo de cráneo termina búsqueda de desaparecidos en lago Rapel

Ministro en visita Héctor Solís está encargado de la causa por el fusilamiento de 22 campesinos detenidos en Paine en octubre de 1973. El director del Servicio Médico Legal, Patricio Bustos, informó que el organismo ya se ha puesto en contacto con los familiares de los detenidos desaparecidos para efecto de los exámenes de rigor.


Un cráneo, medio centenar de fragmentos óseos y restos de vestimentas fue el resultado de la búsqueda que se realizó en las cercanías del lago Rapel a cargo del ministro en visita Héctor Solís.



El juez está encargado de la causa por el fusilamiento de 22 campesinos detenidos en Paine en octubre de 1973, presuntamente a cargo del entonces coronel Andrés Magaña.



En el fundo Cerro Alto, a unos 1.500 metros del mencionado cuerpo de aguas, trabajaron cerca de 25 peritos por cerca de tres meses, que encontraron también vainillas de bala.



Según se informó oficialmente, se hallaron 295 fragmentos óseos y 311 evidencias culturales (fragmentos textiles, botones, fragmentos de vidrios ópticos, anillos, broches, entre otros).



Asimismo, en la búsqueda se encontraron al menos 100 vainas de fusil y revólver y 150 proyectiles percutados.



El director del Servicio Médico Legal (SML), Patricio Bustos, informó que el organismo ya se ha puesto en contacto con los familiares de los detenidos desaparecidos para efecto de los exámenes de rigor.



La autoridad enfatizó este miércoles que lo importante de la diligencia de reconocimiento de los restos son sus resultados y no sus plazos.



«Estamos absolutamente de acuerdo en que nosotros lo vamos a hacer en el menor tiempo posible, pero con la calidad técnica acreditada internacionalmente que esta situación amerita», comentó.



«Encontrar osamentas que correspondan al tiempo en que hubo víctimas de la dictadura y que estén siendo buscados por ministros de causas de derechos humanos es un tema muy importante. Estamos en alerta permanente frente a estas posibilidades», dijo.



De momento, los hallazgos se confrontan con las muestras que aloja el bando de ADN de Teatinos 240, mientras que el material balístico fue derivado al laboratorio de Carabineros.

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