Publicidad

Cumbre de Lisboa es considerada un éxito y niegan ruptura comercial

Pese a la persistencia de algunas divergencias, líderes apuntan hacia la continuidad de la negociaciones y el consenso.


Los dirigentes de la Unión Europea (UE) y de la Unión Africana aseguraron hoy que la cumbre entre los dos continentes fue un éxito y negaron que las diferencias para renovar algunos acuerdos comerciales hayan supuesto alguna «ruptura».



El presidente de la comisión de la Unión Africana, Alfa Omara Konaré, señaló que «hay puntos de desacuerdo pero no rupturas» en ese tema y expresó la disponibilidad de los países africanos para «continuar negociando y buscar formulas de consenso».



Sobre la misma materia, el presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, señaló que los europeos quieren garantizar una «transición suave» en esos acuerdos comerciales, de tipo preferencial y que deben ser modificados antes de que acabe este año por imperativo de la Organización Mundial de Comercio.



Europa está dispuesta a debatir las «preocupaciones» de sus socios, agrego Barroso, que recordó que la firma de esos acuerdos no era un objetivo de esta cumbre y que la UE ofrece un mercado 100 por cien abierto.



Europa va a dar tiempo a los gobiernos africanos afectados, agregó, para reflexionar e intentar superar el problema con el «espíritu de Lisboa» basado en el diálogo y la comprensión.



En una rueda de prensa en la que participaron también José Sócrates, el primer ministro de Portugal, que ejerce la presidencia de la UE, y John Kufuor, de Gana y presidente de turno de la Unión Africana, todos los líderes coincidieron en elogiar el desarrollo y los resultados de la reunión, en la que han participado 80 países.



Kufuor consideró que se ha creado «una nueva plataforma» de relaciones entre las dos partes, con unos criterios igualitarios y nuevos proyectos de cooperación que se ejecutarán mediante un «plan de acción» y tendrán además seguimiento a través de encuentros regulares y frecuentes.



«La globalización avanza a tal ritmo que no va a quedar a la espera de los más lentos», agregó, tras destacar también la «atmósfera» creada en Lisboa, lo «extraordinaria» que había sido la conferencia y señalar que «históricamente marca una alteración radical en las relaciones» UE-Africa.



Sócrates reiteró también el carácter «histórico» de la cumbre, que había resaltado poco antes al clausurar formalmente la cumbre, y dijo que hay un «nuevo espíritu, el espíritu de Lisboa» que definió por la «igualdad y el respeto mutuo» entre los estados europeos y africanos.



Konaré manifestó que los resultados conseguidos en Portugal eran fruto de muchos meses de trabajo que hacen de «Lisboa un resultado y un punto de partida».



«Estamos satisfechos por haber tenido un diálogo franco», agregó al pronosticar que la asociación con Europa traerá ventajas a todos «y también a Africa».



No obstante el presidente de la Comisión de la Unión Africana exhortó a «acabar con el pacto colonial para que Africa no sea considerada sólo como un mercado y sus riquezas sean remuneradas a un precio justo».



«Hay que crear las condiciones para que las materias primas sean transformadas en productos de Africa», abundó.



En materia de gobernación democrática y derechos humanos los cuatro dirigentes informaron de que los temas habían sido discutidos en la cumbre y Konaré puntualizó que «hay problemas de gobernación que deben resolver los africanos sin recibir lecciones».



Por su parte, Barroso declaró que ahora «hay razones para el optimismo» en materia de democracia en Africa al recordar que se celebran elecciones, y hay progreso en materia de gobernación.



No obstante, reconoció que «subsisten algunos problemas que se discutieron de forma franca y directa» y reiteró que «no se puede aceptar que quienes lucharon por la independencia de sus países nieguen ahora la libertad a sus pueblos».



EFE

Publicidad

Tendencias