Miembros de la Conadi designados por el Gobierno apoyaron tácitamente a sus pares elegidos por las comunidades, que exigen que mientras el organismo internacional no se pronuncie sobre la viabilidad de la »declaración interpretativa» que la comisión de Relaciones Exteriores del Senado incluyó en el documento, el texto no sea visto por la Sala.
Los consejeros electos de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi) rechazaron la forma en que se aprobó este martes, en la comisión de Relaciones Exteriores del Senado, el Convenio 169 sobre Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes.
Los representantes de las distintas etnias recurrirán ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para que se someta al criterio de esta institución la factibilidad de que el documento sea aprobado junto a una "aclaración interpretativa".
La aclaración apunta a señalar que este instrumento sólo es aplicable a los tratados vigentes ratificados por Chile y no es vinculante con otras declaraciones internacionales, como la de Naciones Unidas sobre Pueblos Indígenas.
Básicamente, los consejeros indígenas reclaman que la "aclaración interpretativa" desactiva la influencia de otros tratados por sobre el convenio y no haría este último vinculante u obligatorio para las autoridades chilenas.
De esta manera, los consejeros intentarán que el texto no sea votado por la sala de la cámara alta mientras la entidad internacional no se pronuncie sobre el fondo del asunto.
La información fue entregada a El Mostrador.cl por el consejero de La Araucanía Hilario Huirilef.
La instancia está compuesta por ocho consejeros electos democráticamente en las comunidades a las que pertenecen, más ocho de confianza del Gobierno y el director, que dirime en caso de empate.
El Convenio 169 es una iniciativa destinada a la participación indígena, mantenimiento de la lengua y la cultura, entre otros aspectos. Chile, desde 1989 a la fecha, es el único país que no lo ha ratificado.
El texto ingresó a la Cámara de Diputados en 1991 y hasta 2007 se ha evitado que ingrese a votación al Senado, ya que al ser rechazado se deben esperar otros 10 años para analizarlo nuevamente.
Ministros
Contrario a lo que podría pensarse, los ministros del gobierno de Michelle Bachelet no rechazaron la postura de los consejeros indígenas, sino que dieron un apoyo tácito al señalar que esperarán lo que determine la OIT.
Sus declaraciones se producen en el marco del consejo nacional de la Conadi que sesiona desde este miércoles en el hotel Windsor, donde se conversó también sobre la violencia en la zona mapuche.
Durante la mañana, concurrió al lugar el secretario general de la Presidencia, José Antonio Viera-Gallo, para explicar los alcances jurídicos y por qué se incluyó esa tacha en el tratado.
Fuentes que estuvieron presentes en la cita dijeron que el funcionario aseguró que el Estado no podía hacer otra cosa porque estaba obligado por la Constitución.
A eso del mediodía, se hizo presente la nueva titular del Mideplan, Paula Quintana, quien sostuvo un encuentro protocolar con los integrantes de la Conadi para conocer y adentrarse en la agenda.
Durante la cita, Huirilef aprovechó de exigirle: "Ministra, no pierda la oportunidad de dialogar".
"Es un desenlace de todo"
Consultado Huirilef sobre la actitud adoptada por el Gobierno en torno a la aprobación de este convenio, manifestó que "el Ejecutivo quiere dejar más tranquila a la derecha que a los mapuches".
En ese sentido, agregó que esta situación es una más de las promesas incumplidas de Bachelet.
También dijo que, vinculado a este tema político, está la violencia en el sector de La Araucanía. "Es un desenlace de todo", recalcó.
Añadió que uno de los problemas actuales del Ejecutivo con las comunidades indígenas es que, a diferencia de lo ocurrido con Aylwin, Frei y Lagos, Bachelet tiene menores compras de tierras en la zona para tratar de restituir territorios ancestrales.
De todos modos, aclaró que en ningún caso apoyaba los actos violentos y que su postura siempre ha estado de parte del diálogo y la democracia, reconociendo que hechos de ese tipo son la respuesta de un grupo de personas que se siente segregado.
