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Todas las miradas sobre Hinzpeter

Claudia Rivas Arenas
Por : Claudia Rivas Arenas Periodista de El Mostrador @crivasa
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El nombre del ministro del Interior –por estos días de vacaciones- está en boca de todos. Y si bien cuesta creer que el Presidente Piñera esté dispuesto a perder a su más fiel escudero, no faltan los que apuestan a que se diga lo que se diga, de haber un cambio tiene que ser “profundo”. Sobre todo luego que el jefe de Estado reconoció una falencia importante en materia de seguridad ciudadana.


Los cambios de gabinete siempre generan ansiedad en los gobiernos de turno, pero en el de Sebastián Piñera son particularmente mal vistos, porque los consideran un estigma para los que se van. Aún así, debido a la alta tensión política que han provocado las manifestaciones multitudinarias, comenzó a tomar cada vez más fuerza la idea de cambiar el equipo ministerial y, nuevamente, se centró el foco en la figura del titular de Interior, Rodrigo Hinzpeter. En el oficialismo admiten que sobre el Presidente de la República recae una fuerte presión a partir del hecho de que se han acrecentado las críticas en contra de su brazo derecho. En RN, tienda política del jefe de gabinete, lo defienden a brazo partido y acusan a sus aliados de levantar su nombre como un eventual candidato a dejar La Moneda para “blindar” a la vocera, Ena von Baer.

Tal como en otras oportunidades, Renovación Nacional cerró filas en defensa de la figura de su partido mejor posicionada en el gabinete político. Aunque todos descartan de plano la salida de Hinzpeter. “Es imposible que lo saquen”, dice una alta fuente de la tienda de Antonio Varas, quien estima que en la misma situación está Joaquín Lavín. En la colectividad advierten que los rumores acerca de una eventual salida del hombre de confianza del mandatario, “siempre los echan a correr desde la UDI, con el fin de blindar a la Ena que siempre está a punto de caer”. Ante este comentario, un observador de RN admite que en situaciones como la que atraviesa ahora el gobierno de Piñera, de “alta tensión”, la relación entre ambos partidos del pacto gobiernista tiende a complicarse, porque ambos contribuyen a “extremar sus diferencias en defensa de los suyos”.

Ni en RN ni en la UDI pasó inadvertido el análisis de Roberto Méndez en La Tercera. En el gremialismo se solazaban de que el experto y consejero del Presidente -hacen hincapié en ello- hizo el mismo análisis que ellos vienen haciendo desde hace meses. Y se sienten respaldados por el hecho de que sea un asesor del Presidente quien coincida con sus críticas hacia Hinzpeter. Méndez afirmó, entre otras cosas, que “hay un déficit en el diseño como en el manejo político. El ministro del Interior no ha cumplido con su rol articulador y de jefe de gabinete. Hay una falencia en la relación con el Congreso y con la oposición”.

Todos los costos

En defensa de Hinzpeter, en RN sostienen que el jefe de gabinete “ha asumido más los costos de temas que están ajenos a él. Como por ejemplo en educación, medio ambiente y energía”. Por otra parte, el timonel del partido, Carlos Larraín, aludió ayer en Radio Duna a la falta de espacio que tendría el ministro del Interior para conducir el gabinete. Junto con descartar que el brazo derecho de Piñera sea quien asuma los costos de los errores políticos de la actual administración y que “pretender que don Sebastián Piñera prescinda de Rodrigo Hinzpeter no me parece natural ni lógico pedírselo, porque se tienen mucha confianza recíproca”. Y señaló que “el gran cambio de gabinete consistiría en que el Presidente Piñera le diera más soga al ministro del Interior. (…) que le diera más autonomía”. En contraste con declaraciones anteriores, manifestó que no tiene tan claro que un cambio de gabinete descomprima la actual situación.

[cita]Un analista de RN sostiene que en el diseño original del gobierno de Sebastián Piñera no estaba contemplado que el ministro del Interior jugara un rol de articulador político ni mucho menos. Por el contrario, explica que la idea siempre fue que esa cartera fuera sectorial, por lo que en ese contexto las críticas de la UDI no tienen asidero alguno. Tampoco aquellas que hace Roberto Méndez. En lo que sí puede tener razón la UDI, admite el experto, es en que en materia de delincuencia “se ha hecho bien poco” y las cifras están a la vista para hacer esta constatación.[/cita]

Pese a lo complicado del ambiente político, en Antonio Varas no creen que los costos los deba asumir Hinzpeter y aunque admiten que el tema de un eventual cambio de gabinete se abordó en el comité político de ayer, aseguran que no hay señales de que éste se vaya a producir o de que vaya a ser a la brevedad. Por lo pronto, argumentan, que dado que el jefe de gabinete está de vacaciones no parece posible que lo sacaran de su cargo antes de que se reincorpore, lo que recién ocurrirá el próximo lunes.

En la UDI, en tanto, prefieren no hacerse falsas expectativas. Coinciden con sus socios en que es difícil que Piñera deje ir a su hombre de confianza, pero también insisten en que el jefe de gabinete “es el responsable de ordenar al equipo y eso no lo ha estado haciendo”. Pero aún así están viendo que no será fácil que en La Moneda se haga “una autocrítica profunda” respecto de qué se está haciendo mal y menos todavía que como resultado de la misma, si es que se hiciera, sea el titular de Interior quien asuma los costos políticos.

A diferencia de sus aliados, en el gremialismo sostienen que si ha bajado en los sondeos de opinión ha sido porque “la gente entiende que no ha hecho la pega, particularmente en los ámbitos que le competen como en delincuencia”, aludiendo a los polémicos dichos que pronunciara ayer el jefe de Estado en la que reconoce que “no hemos ganado y, tal vez, nunca vamos a ganar la batalla contra la delincuencia”, frase con la que varios oficialistas afirman que “le hace un flaco favor” a sus escudero.

También plantean que si Piñera se siente presionado es porque percibe que “hay algo que su ministro preferido no está haciendo bien”. Ante la acusación, de RN de que Hinzpeter está en tela de juicio porque asume costos que corresponden a otros ministros, en la casona de calle Suecia responden con la última Adimark en mano. Para el gremialismo la tremenda baja que sufrió Joaquín Lavín y la menos llamativa que ha afectado paulatinamente a la vocera, demuestran que “lo que ellos dicen no es así. Aquí cada uno tiene que poner su capital político al servicio del gobierno para que le vaya bien. Así es en una coalición”.

La delincuencia es el flanco

Un analista político de RN tiene una mirada distinta. Sostiene que en el diseño original del gobierno de Sebastián Piñera no estaba contemplado que el ministro del Interior jugara un rol de articulador político ni mucho menos. Por el contrario, explica que la idea siempre fue que esa cartera fuera sectorial, por lo que en ese contexto las críticas de la UDI no tienen asidero alguno. Tampoco aquellas que hace Roberto Méndez. En lo que sí puede tener razón la UDI, admite el experto, es en que en materia de delincuencia “se ha hecho bien poco” y las cifras están a la vista para hacer esta constatación.

Y añade que es ahí donde efectivamente Hinzpeter tiene un importante grado de responsabilidad y que evidentemente la ciudadanía le está pasando la cuenta. Esa “es la razón de la baja en las encuestas. Porque, después de todo, el combate a la delincuencia fue una de las más importantes razones por las que la gente votó por Piñera”.

Pero mientras, como siempre, ya circulan nombres de los posibles salientes y entrantes al equipo de gobierno, este experto oficialista sostiene que de haber cambios, esta vez debería ser “un cambio de gabinete profundo y no un ajuste ministerial como la vez pasada”.

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