Mientras la vicepresidenta de RN Catalina del Real llamó a los legisladores a defender la vida “desde la concepción hasta la muerte”, la vicepresidenta de la DC Laura Albornoz afirmó que “no puede encarcelarse a una mujer si se interrumpe el embarazo para salvar su vida o preservar su salud o cuando éste es producto de una violación”.
Luego que volviera a encenderse el debate en el Congreso sobre el aborto terapéutico, las vicepresidentas de RN y la DC, Catalina del Real y Laura Albornoz, respectivamente, expresaron por separado su opinión en contra y a favor de la medida.
La dirigenta oficialista y concejal por Vitacura hizo un llamado a los legisladores a que, de manera “transversal” rechacen todos los proyectos de aborto que estaban en discusión en el Senado, especialmente a los de la oposición, bajo el argumento que “no se puede jugar a ser Dios”.
“Renovación Nacional reitera su defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural y confiamos que ese derecho esencial será defendido con fuerza por nuestros parlamentarios”, señaló Catalina Del Real, enfatizando que “no se puede calificar como terapéutico la muerte de un inocente que no se puede defender”.
Y agregó que “es inaceptable que los mismos que se oponen a la pena de muerte, hoy estén a favor de este proyecto. Ellos argumentan que se debe legalizar el aborto. Eso sería tan ridículo como legalizar el homicidio. En lo que debemos enfocarnos es en acoger y apoyar a las mujeres que presentan un embarazo no deseado”.
Por el contrario, Laura Albornoz rechazó que se quiera penalizar a aquellas madres que interrumpen su embarazo cuando su vida esta en peligro, como también en los casos de violaciones.
“No puede encarcelarse a una mujer si se interrumpe el embarazo para salvar su vida o preservar su salud o cuando éste es producto de una violación”, enfatizó la actual candidata a alcaldesa por Santiago y ex ministra del Sernam.
Finalmente sostuvo que “claramente yo estoy a favor de la vida, pero hay una realidad ante la cual no podemos cerrar los ojos y hacer oídos sordos”.
