“Él fue elegido presidente de la Democracia Cristiana en 2002 y por lo tanto mi obligación como Presidente de la República era escuchar al nuevo timonel. Tuvimos innumerables reuniones en La Moneda en donde aprendí a aquilatarlo, a conocerlo mejor todavía y claro, había encuentros y desencuentros, como en todo sistema y todo gobierno”, dijo el ex mandatario tras entregar sus condolencias a la familia del fallecido embajador de Chile en Argentina y ex timonel de la DC.
Como un hombre que enfrentó la vida pública con “pasión” describió el ex presidente Ricardo Lagos Escobar al fallecido embajador de Chile en Argentina Adolfo Zaldívar, luego de participar en un responso encabezado por el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, en la sede del Congreso Nacional en Santiago, donde están siendo velados los restos del ex parlamentario.
Pasadas las 18:30 horas, Lagos llegó hasta ese lugar donde presentó sus condolencias a la viuda y familiares de Adolfo Zaldívar y concluido el responso, conversó con la prensa señalando que la pasión con que el fallecido embajador enfrentaba el servicio público “implicaba una gran convicción en sus ideas”, y recordó aquellos episodios en que siendo él presidente de la República y Zaldívar timonel de la Democracia Cristiana tuvieron públicas diferencias respecto de algunos temas. “No siempre coincidimos, pero coincidimos en los grandes trazos, de cómo luchar para tener un país democrático, y en democracia, cómo luchar por lo mejor para Chile. Y en ese sentido, Adolfo Zaldívar fue un gran senador, fue un gran colaborador en su momento, con las dificultades propias entre un presidente y presidentes de partidos, no era primera vez”, recordó.
Sin embargo, el ex mandatario recordó también a Zaldívar como un gran demócrata, un servidor público y “creo que lo vamos a extrañar, vamos a extrañar su fuerza, su pasión para plantear sus ideas”.
Durante la jornada, los políticos que llegaron hasta el ex Congreso Nacional coincidieron en destacar el carácter fuerte y firme que lo llevó incluso a ser expulsado de la Democracia Cristiana cuando expresó sus diferencias con el partido y optó por respaldar al gobierno de Sebastián Piñera y hacerse de la representación chilena en Buenos Aires.
Aunque la mayoría evocó los aspectos positivos de Adolfo Zaldívar, efectivamente nadie podía pasar por alto las públicas diferencias que también tuvo con la senadora Soledad Alvear, quien lo sucedió en la presidencia de la Democracia Cristiana. Tampoco los desacuerdos que tuvo con Lagos durante su mandato y que el propio ex jefe de Estado evocó esta tarde.
“Él fue elegido presidente de la Democracia Cristiana en 2002 y por lo tanto mi obligación como Presidente de la República era escuchar al nuevo timonel. Tuvimos innumerables reuniones en La Moneda en donde aprendí a aquilatarlo, a conocerlo mejor todavía y claro, había encuentros y desencuentros, como en todo sistema y todo gobierno”, dijo.
No obstante, señaló que “eso no significa, por eso quise venir hoy acá, a despedir a alguien que considero mi amigo. Mi amigo en una forma de mirar el país, amigo en una forma de entender cómo podemos fortalecer el sistema democrático, y amigo en una forma también creo, de cómo estar hoy a la altura de lo que demanda la ciudadanía que son nuevas exigencias que obligan a escuchar muy bien”.
