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Las claves políticas tras el debate televisivo entre Allamand y Longueira El rating de hoy en la noche definirá competitividad del sector con la oposición

Las claves políticas tras el debate televisivo entre Allamand y Longueira

Claudia Rivas Arenas
Por : Claudia Rivas Arenas Periodista de El Mostrador @crivasa
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El estigma que carga la Alianza de que a su electorado le molestan las peleas pesará en el duelo en que los aspirantes del sector debieran no sólo mostrar sus propias fortalezas, sino también las debilidades de su adversario. También estará en el aire el fantasma del bloqueo que la UDI ha hecho a la tramitación de la franja televisiva y la sensación de triunfo que Renovación Nacional ha logrado imponer en el ambiente.


Hoy jueves, a partir de las 22 horas, los aspirantes oficialistas a reemplazar al Presidente Sebastián Piñera, Andrés Allamand (RN) y Pablo Longueira (UDI), se verán enfrentados al ya tradicional proceso de contrastar sus propuestas a vista y paciencia de miles de televidentes interesados en conocer las diferentes posturas, con miras a la primaria en que ambas coaliciones elegirán a sus representantes a través de este mecanismo. Sin embargo, en el propio conglomerado admiten que es difícil que haya confrontación, debido a que en la derecha existe la convicción de que al votante del sector le molestan las peleas, pero también porque el formato del programa no lo permite.

Ante la cercanía del debate, el propio jefe de la bancada de diputados de RN, Pedro Browne, admite que para el votante de la Alianza “marcar tus diferencias es considerado un ataque, porque la derecha le teme a decir lo que piensa y a defender lo que cree. Por eso es también que Andrés es considerado por algunos como conflictivo, porque defiende aquello en lo que cree”. De allí que lo peor que podría ocurrir al aspirante de Renovación es, justamente, caer en una discusión sin sentido con su adversario gremialista, comentan en la casona de Antonio Varas. Pero advierten que eso es muy difícil, porque el formato del programa no permite que un presidenciable pueda desafiar al otro.

Lo ideal, especulan en RN, es que Allamand haga notar la ventaja sobre Longueira con que llega al debate. Los 12 puntos arriba en que estaría su candidato se han convertido en un mantra para las filas del partido. Por ello, “Andrés tiene que repetir lo que hizo en “Protagonistas”, el programa de Canal 13 en que fue entrevistado el domingo antepasado y que fue muy bien evaluado en la tienda. Se estima que allí fue “claro, directo y mostró una tranquilidad absoluta”, muy adecuada —dicen— para que los televidentes comprendan sus planteamientos. Si bien en RN tienen la tranquilidad de quien se siente ganador, es evidente que también cuentan con las debilidades que perciben en Longueira, para salir del estudio de Canal 13 con la certeza de haberse impuesto. Porque, si bien saben que el ex titular de Economía es un buen candidato, también están convencidos que “le cuesta mucho más explicarse, esa es su debilidad”.

[cita]Ante la cercanía del debate, el propio jefe de la bancada de diputados de RN, Pedro Browne, admite que para el votante de la Alianza “marcar tus diferencias es considerado un ataque, porque la derecha le teme a decir lo que piensa y a defender lo que cree. Por eso es también que Andrés es considerado por algunos como conflictivo, porque defiende aquello en lo que cree”. De allí que lo peor que podría sucederle al aspirante de Renovación es, justamente, caer en una discusión sin sentido con su adversario gremialista, comentan en la casona de Antonio Varas.[/cita]

En todo caso, en la UDI aplauden y se felicitan de que Laurence Golborne haya dado, finalmente, una señal pública de apoyo al abanderado del partido. Haciendo caso omiso al hecho de que no fueron pocos los representantes gremialistas que tuvieron que interceder para que ayer se concretara el “gesto”, en un café. Como sea es una credencial con la que Longueira intentará atraer al mundo independiente que quedó huérfano de candidato, luego de la bajada del ex ejecutivo de Cencosud. Y le permitió al abanderado anunciar —y podrá reiterarlo hoy, dado el caso— que “vamos a incorporar en nuestro programa todas las medidas que venía trabajando (Golborne) con sus equipo” y que “todas las personas que vieron en la candidatura de Laurence una esperanza para que haya un próximo gobierno de la Alianza (…) sientan que voy a asumir con la misma pasión y la misma entrega”.

Tras este episodio, no falta el optimista que se atreve a especular que si Longueira gana la primaria, “no me extrañaría que Golborne asumiera un rol muy importante en su campaña”, pese a que el ex titular de Obras Públicas, consultado respecto del tema dijo que “no me corresponde a mí ser el protagonista de nada”. Interpretación que, justamente, hacen desde la tienda aliada, donde especulan que “no da la impresión que este encuentro vaya a cambiar significativamente la situación de Longueira. Tal vez hubiera servido de algo si Golborne se hubiera sumado derechamente a la campaña y hubiera recorrido, por varias semanas, el país acompañando a Longueira”.

El dilema de la franja

Por otra parte, la alta sintonía del debate de los representantes de la Nueva Mayoría, este lunes, le dejó una difícil prueba al oficialismo. Tanto en la UDI como en RN admiten que fue inesperado el alto rating de 19 puntos y 24 en el peak que tuvo el primer debate. Al punto que un parlamentario gremialista sostiene asombrado que “en otros tiempos eso era impensado, desde cuándo a la gente le importa tanto la política”. En Renovación Nacional eso genera una gran expectativa, en cuanto a que algunos creen que el interés que el debate de la derecha despierte en el electorado podría estar relacionado a la disposición de ir a votar en la primaria; mientras que desde el gremialismo se percibe un cierto “doble estándar” que ya ha denunciado RN en múltiples ocasiones.

Todo comenzó cuando se rechazó la indicación que creaba la franja televisiva en el proyecto de perfeccionamiento de las primarias. En la ocasión el gobierno, a través del ministro Cristián Larroulet, se comprometió a enviar inmediatamente una iniciativa con urgencia para que fuera tramitada y pudiera ser implementada en esta primaria. No obstante, nunca se le puso la urgencia comprometida y la UDI “la bloqueó de todas las formas posibles”, se lamenta un diputado de RN. De hecho, en una primera votación, el gremialismo la rechazó. Finalmente, el martes la aprobó en general, pero rechazó el articulado, salvo por un par de diputados que se descolgaron, entre ellos Carlos Recondo. Eso permitió que el mismo martes en la tarde se diera cuenta del proyecto en la Sala del Senado, pero el gremialismo no se rindió.

Adicionalmente, el ministro Larroulet, desconociendo el compromiso del gobierno y el discurso público que tiene el Ejecutivo, a través del propio Presidente Sebastián Piñera, notificó a la Comisión de Gobierno de la Cámara Alta que no respaldará la iniciativa, porque algunos candidatos que no participan en primarias han hecho ver que estarán en desventaja.

En fin, es muy probable que, pese a las presiones de la oposición y Renovación Nacional, aunque se apruebe el proyecto en los próximos días, no den los plazos para que se aplique a esta primaria. Por lo mismo, en la Sala del Senado ha habido varios enfrentamientos verbales entre senadores de RN y la UDI. Uno de ellos ocurrió el martes, cuando Francisco Chahuán (RN) confrontó al UDI Jovino Novoa por el tema. Ello, porque uno de los peores temores de Renovación es que sus socios “quieren mantener la primaria lo menos informada posible, en un círculo bien restringido, para poder recurrir al acarreo y no al voto responsable e informado”.

Definitivamente este es un tema importante para RN, al punto que su timonel Carlos Larraín llega a sostener que “el principal temor que tengo es que las personas más bien de nuestro sector no comprendan que en las primarias se decide no sólo quién es candidato, sino acaso tenemos o no posibilidades el 17 de noviembre. Así de importante son. Y creo que por inercia, que tienen los sectores medios en particular, de creer que la política es una cosa distante y ajena, perfectamente pueden dejar que este asunto sea —lo dijo Roberto Méndez— un fiasco. Ese es mi principal temor. Entonces, veo con alarma que, por ejemplo, se bloqueó la idea de la franja electoral para las primarias”.

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