Advierte los riesgos del proceso diseñado para llegar a la nueva Constitución
«Hay algo de minorías étnicas, pero no mucho. No hay personas que representen a las regiones… en fin, me llamó la atención que fuera un grupo tan poco sensible al hecho que debería mostrar apertura a las diversas formas de diversidad» afirmó el abogado constitucionalista.
El abogado constitucionalista Fernado Atria, uno de los partidarios del proceso de Asamblea Constituyente, para dar con una nueva Constitución Política que reemplace a la cuestionada de 1980, se refirió al recientemente nominado Consejo Ciudadano de Observadores, compuesto por 17 personas convocadas por la Presidenta Michelle Bachelet.
Atria, no esconde sus cuestionamientos a la composición del grupo. «Me sorprende la manera en que este consejo muestra que lo que más importa en el proceso constituyente, es dejar tranquila a la derecha. Eso no da cuenta de la situación actual de deslegitimación de los poderes institucionales. Hay otra parte del país que necesita ser considerada y también me sorprende la escasa integración femenina que tuvo; era una oportunidad para mostrar criterios de paridad”, dijo en entrevista con La Tercera.
El jurista que milita en el Partido Socialista ahonda sobre este punto, explicando que no es una condición negativa en si misma. «Hay una cantidad especialmente alta de personas que están vinculadas a la derecha en esto, evidentemente la derecha está sobredimensionada en este consejo. También es verdad que, como la Constitución es de ellos, son los principales opositores a este cambio. Supongo que la lógica fue incorporarlos al baile. Y en esa dimensión, si logra serlo, puede ser una cosa que resulte positiva», explicó.
De todas maneras, el académico de la Universidad de Chile cuestiona la elección de los integrantes del grupo. «Hay algo de minorías étnicas, pero no mucho. No hay personas que representen a las regiones… en fin, me llamó la atención que fuera un grupo tan poco sensible al hecho que debería mostrar apertura a las diversas formas de diversidad», afirma.
Sin embargo, Atria valora la intención sobre la cual la comisión fue creada. «No conozco el detalle, pero entiendo que su función es observar para dar garantías de que el proceso de educación cívica y participación ciudadana no vaya a ser un proceso manipulado. Supongo que si es una comisión de observadores, bueno, hasta cierto punto es razonable que no tengan un cronograma de trabajo», dijo.
Por último, el abogado advierte de los riesgos que tiene el proceso para cambiar la Constitución que impulsa el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet.
«Creo que el cronograma que anunció la Presidenta Bachelet, corre el serio riesgo de ser neutralizado por las trampas de la Constitución y, entonces, quedar en nada. Es un serio riesgo, pero no sólo de ésta comisión de observadores, sino del proceso anunciado por la Presidenta. Ahora, también es verdad que abre oportunidades para que mediante la educación cívica y la participación ciudadana, se vaya creando una demanda ciudadana por nueva Constitución que logre vencer estas trampas. Hasta cierto punto es un espacio de disputa y, como tal, es posible que sea neutralizado y quede en nada, pero también es posible que en las condiciones actuales, termine siendo la manera en que nos abrimos paso a una Constitución que no es tramposa»
