«Dar un paso al costado y renunciar señor Rincón y directivos que le acompañan, sería más digno y beneficioso para nuestro partido. Claro está, en el supuesto, muy temerario, (lo reconozco) que conocen el significado de este adjetivo calificativo, de lo cual por cierto -a estas alturas- dudo sinceramente…», expresó Juan Carlos Ramírez a través de una carta para el diputado DC.
A mediados de agosto se hizo público el caso que afectó al diputado DC Ricardo Rincón, quien en 2002 fue declarado culpable de agredir brutalmente a su ex pareja. Luego de las explicaciones que entregó el parlamentario, la directiva del partido manifestó el rechazo explícito a su comportamiento y consideró aplicarle alguna sanción disciplinaria.
En ese entonces Rincón pidió ser reemplazado en la Comisión de Familia de la Cámara y en su lugar estuvo el diputado Juan Enrique Morano. Pero en rigor no existe ninguna norma que considere su suspensión de la instancia y, al cabo de dos meses, cuando ya la presión mediática ha disminuido, el parlamentario volvió a su puesto.
Tras las recientes elecciones municipales el presidente PDC comunal de Rengo, Juan Carlos Ramírez, escribió una carta a Rincón, quien es diputado por la región O’higgins, y lo tildó de «patrón de fundo» y «matón de cuarta», por la agresión a su ex pareja. Además recalcó que luego de las municipales la DC sufrió «un fracaso rotundo, categórico. Es un No; no los queremos más. No queremos mas su forma de hacer política, marcada por el matonaje, el oscurantismo, carente de toda transparencia y y respeto a los valores más esenciales de la democracia; propia de un patrón de fundo rodeado de inquilinos que agachan la cerviz y asienten con total indignidad, cobardía y obsecuencia a los valores permanentes de la doctrina del Humanismo cristiano, como es el respeto a la persona humana», manifestó el presidente comunal.
«Estimado señor presidente de facto de la DC Regional, siento disentir y aguarle el asado, pero me parece que su análisis (o el del presidente desaparecido) lo hizo (o lo hicieron) en Marte porque lo que es aquí en la tierra, más específicamente en la Sexta Región, los resultados son paupérrimos», así comienza la carta.
«Permítame decirle señor Secretario Regional (o presidente de facto?) bueno -ante semejante descalabro político-electoral da lo mismo- que uno de los principales responsables sepultureros de este funeral es “nuestro presidente regional”, desaparecido en acción (no habido). O le cabe alguna duda que el triste y repudiable espectáculo que dio, (en realidad que viene dando desde hace ratito ya) a través de la prensa nacional con sus “afortunadas” declaraciones respecto de su “reguleque” sueldo, o cuando declaro que su familia estaba primero que el soberano (el pueblo que lo eligió) o el escandaloso episodio del Sename Sexta Región, con sus oscuras y “sugeridas” ( o impuestas? contrataciones a su clientela electoral y finalmente, para rematar, el conocimiento por parte de todo el país de su brutal, cobarde y vil agresión a su pareja con golpes de pies y puños digno de un matón de cuarta, respecto de la cual -dicho sea de paso- usted y la DIRECTIVA REGIONAL COMPLETA, NO DIJERON UNA SOLA PALABRA, AVALANDO CON UN SILENCIO CÓMPLICE, VERGONZOSO, COBARDE E INDIGNO DE DIRIGENTES DC, ESTE NUEVO “NUMERITO” de nuestro diputado, presidente regional y consejero nacional que dañó como pocos lo poco que queda de la ya deteriorada imagen de un partido “decente”. Como le iba diciendo camarada, de un total posible de 200 cupos a concejales a elegir, en la nunca bien ponderada Región de O’higgins, se obtuvieron, 37, es decir, el 18,5 puntos porcentuales. De los cuales, nuestro presidente y diputado del distrito obtuvo 14 el %, o sea 7 puntos porcentuales del universo elegible. ¿Es para estar contentos y felicitarnos ? Siento, pues disentir con UD o (ustedes)», expresó en la misiva.
Asimismo finalizó el texto indicando que «dar un paso al costado y renunciar señor Rincón y directivos que le acompañan, sería más digno y beneficioso para nuestro partido. Claro está, en el supuesto, muy temerario, (lo reconozco) que conocen el significado de este adjetivo calificativo, de lo cual por cierto -a estas alturas- dudo sinceramente…», sentenció Ramírez.
