El diputado del Frente Amplio también volvió a criticar la decisión del Servel de simplificar el refichaje en los partidos políticos
«Es una persona muy digna en términos personales, pero representa las mismas ideas y a la misma coalición que ha demostrado que no tiene la coherencia interna suficiente como para liderar un proyecto transformador del país», afirmó el parlamentario [Actualizada]
El diputado del Frente Amplio Gabriel Boric habló hoy respecto a la figura de Alejandro Guillier, y sus opciones de llegar a La Moneda, realizando una crítica a su figura desde lo político.
Entrevistado por Radio Cooperativa, el legislador hasta citó al cantautor cubano Silvio Rodríguez: «De Guillier yo diría, citando a Silvio Rodríguez, que es un servidor de pasado en copa nueva». Agregó que el periodista «es una persona muy digna en términos personales, pero representa las mismas ideas y a la misma coalición que ha demostrado que no tiene la coherencia interna suficiente como para liderar un proyecto transformador del país».
Para Boric no hay mayores diferencias de fondo entre el senador por Antofagasta y la coalición que éste representa: «Independiente de que la cara sea nueva, al final termina representando lo mismo».
Otro tema abordado por el diputado fue la buena figuración que tanto él como Giorgio Jackson tienen en las encuestas, incluso al ser evaluados como opciones presidenciales a pesar de no cumplir con la edad legal para postular. «Una cosa es lo que digan las encuestas y otra creer que porque uno sale bien en dos encuestas consecutivas tiene la experiencia necesaria para ser Presidente de Chile», sentenció, reconociendo además que «no tenemos (él y Jackson) ni la edad ni la experiencia».
Boric opinó también respecto a la polémica con el Servel, debido al cambio de las condiciones de refichaje de partidos. «Todas esas frases comunes que tienden a decir desde la elite política, ‘dejen que las instituciones funcionen’, al final se va a las pailas cuando son ellos mismos los que las controlan», agregando que «a mitad de camino (el Servel) cambiaron las reglas de juego cuando se dieron cuenta de que los partidos no eran capaces de convocar a su propia militancia».
