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«En cualquier otro lugar del mundo esos lideres habrían desaparecido, ha sido realmente desastrosa la conducción de la Iglesia», afirmó el Presidente ejecutivo internacional de la Fundación América Solidaria, quien también estuvo a cargo de la visita del Papa en Chile.
Esta mañana el Presidente ejecutivo internacional de la Fundación América Solidaria, Benito Baranda, se refirió a la reunión que mantuvo el Papa Francisco con las víctimas de abusos sexuales de Fernando Karadima, y lanzó fuertes críticas sobre los cardenales Francisco Errázuriz y Ricardo Ezzati, que ha su juicio, «le han causado un gran daño a la Iglesia chilena».
En conversación con Tele13 Radio, Baranda se refirió a la acciones de ambos Arzobispos, de las cartas que se enviaban y de haber responsabilizado a la víctimas de Karadima por la cobertura negativa que recibió la iglesia católica durante la visita de Jorge Bergoglio. «Eso demuestra que ellos ven en los otros el mal y no en las acciones de ellos», manifestó.
Siguiendo con las víctimas de abuso en la Iglesia, Baranda señaló que «lo más duro que ha ocurrido es que estás personas no fueron escuchadas aquí en Chile por las autoridades correspondientes, tuvieron que ser recibidas por una persona mayor a esas autoridades que es el Papa».
«En cualquier otro lugar del mundo esos lideres habrían desaparecido, ha sido realmente desastrosa la conducción de la Iglesia», aseguró.
Para el ex director social del Hogar de Cristo la reunión que sostuvo Juan Carlos Cruz, James Hamilton y José Andrés Murillo con el Obispo de Roma ha sido muy importante, ya que gracias a esto «el Papa se ha dado cuenta del desastre que tiene la Iglesia chilena», afirmó.
El encargado de la visita del Papa a Chile lanzó una fuerte crítica contra la Iglesia Católica y aseguró que «desde antes del caso Karadima viene esta critica (a la institución)», Los reparos vienen desde que «la autoridad (eclesiástica) se aleja de la pobreza y de los jóvenes», y finalmente «esta crisis termina por profundizarse» con los casos de abuso.
Baranda también tuvo palabras para los cardenales Errázuriz y Ezzati, y dijo que «estas personas no tienen habilidades ni capacidades para hacer lo que están haciendo».
«Las sanciones del Papa tendrán que ser extremadamente severas si no esto va a terminar siendo más de lo mismo», aseveró.
