Carlos Lavín Subecaseux, hijo homónimo del socio controlador del grupo Penta y conductor del programa ‘Información Privilegiada’ de Radio Duna, apareció públicamente ayer en tribunales.
Con la prensa asistiendo en masa al tribunal, Lavín junior debió estar frente al juez que ve la causa laboral que enfrenta a Hugo Bravo con sus ex amigos Lavín padre y Carlos Alberto Délano. En el caso se discute la solicitud de indemnización de Bravo por $ 2.300 millones.
En el marco de esa causa fue que el referido Bravo presentó una grabación secreta que hizo de una conversación con Lavín padre el 7 de septiembre de 2014 y donde participó Lavín hijo. Por su participación en dicha reunión fue que ayer Lavín hijo debió declarar como testigo.
Y su presencia parecía perfectamente preparada, pese a la insistencia del juez. Lavín presentó una falta de memoria total aun contra varias evidencias que revelarían que tal vez su memoria no es tan mala.
Sueldo de gerente
Carlos Lavín Subercaseux es director de tres empresas ligadas al grupo Penta: Penta Market (donde además es socio en forma individual), Penta Las Américas Administradora General de Fondo y la compañía de seguros Pentavida.
Sobre esta última, el juez le consultó cuánto ganaba el gerente general. Lavín, siendo director desde hace casi 7 años, dijo no recordarlo. “¿Siendo director no lo recuerda?”, le insistieron. “Es que, sabe, hay sueldos variables y fijos”, fue la respuesta de Lavín junior. Luego le preguntaron por el sueldo de gerente general de Penta Market y sí recordó que era en torno a $ 4 millones brutos.
Aguas arriba
Luego le preguntaron si sabía cuánto ganaba Hugo Bravo en Penta y Lavín se escabulló desplegando lo que ya era su respuesta tipo: que Bravo tenía labores aguas arriba en el holding Empresas Penta y las sociedades a través de las cuales participa el grupo que su padre controla, y que, como él sólo participa en directorios de tres empresas filiales, no tiene acceso a dichas sociedades “aguas arriba”.
El magistrado, después, abordó la reunión entre Bravo y los Lavín padre e hijo del 7 de septiembre. Le consultaron si sabía si Bravo seguía prestando servicios a Penta, pero el conductor de ‘Información Privilegiada’ nuevamente acudió a su posición “aguas abajo” para evadir la pregunta, aunque reconoció que “me inclinaría más por que no”.
Pero el juez le insistió sobre el punto. “Eso no es lo que me recuerdo bien, como no estoy metido en el detalle, no sé si había firmado o no, si estaba desvinculado formal o informalmente, porque es aguas arriba”, repitió.
Fuentes del caso aseguran que en una declaración que prestó en otra causa, el 13 de noviembre pasado, Lavín habría señalado que Bravo había renunciado a Penta, algo que ya era público a fines de julio, antes de que Bravo fuera denunciado por el SII, pero que Lavín junior no recordó en la audiencia de ayer.
“Buena onda”
De vuelta le consultaron si no lo había hablado con su padre, pero Lavín junior intentó despejar las dudas con el relato de su domingo 7 de septiembre y su ánimo “buena onda” con Bravo. “Sabe, señor magistrado, yo fui a almorzar como un domingo cualquiera y terminado el almuerzo mi padre me dice que va a ver a un amigo, me dice quieres acompañarme y yo dije –obviamente lo conocía desde chico– estaba en problemas y cómo tan mala onda”, relató.
El magistrado, insatisfecho con la respuesta, le insistió de distintas formas varias veces, incluyendo a qué indemnización se refería cuando dijo, en una declaración anterior, que se habló de indemnizaciones. “Me imagino que al tema de su salida”, respondió, agregando que volvía a su argumento original de que él no sabía detalles aguas arriba, porque sabe sólo de las firmas donde es director.
Lavín junior pareció olvidar que no estaba tan perdido en la información sobre lo que pasaba en el grupo. El 30 de julio de 2014, un día después que se conociera la denuncia del Servicio de Impuestos Internos (SII) contra Hugo Bravo, el conductor de Información Privilegiada señaló en su programa que el caso sólo concernía a Bravo y no a Penta. Sin embargo, además corrigió a La Tercera por haber informado que Alfredo Moreno había reemplazado a Bravo en el Banco Penta.
Lavín junior intentó zanjar el interrogatorio indicando que él asistió a una reunión de “amigos” y que ellos “empezaron a conversar de temas que la mayoría yo no tenía idea”.
Mala memoria
El juez le preguntó si en el camino conversó del caso con su padre, pero Lavín indicó que sólo hablaron generalidades.
Su respuesta dista de los detalles que reveló el audio grabado por Bravo. En dicha conversación se escucha intervenir poco al conductor de Radio Duna, aunque sus comentarios parecen no dejarlo tan alejado de lo que ocurría.
Cuando abordan los escenarios más intrincados ante la investigación del fiscal Carlos Gajardo, Bravo indica que uno de los temas complejos es el de los “forwards”. Lavín hijo interviene y le baja el perfil a esa posibilidad: “Es repeludo, no hay registros de los forwards, no creo que llegue”.
Luego, cuando su padre Carlos Eugenio Lavín le explica a Bravo que no se tome en forma personal el ‘abandono’ en que parecen haberlo dejado Carlos Alberto Délano y el abogado del grupo Alfredo Alcaíno, señala a su hijo como alguien que está informado del ambiente de desconfianza que hay en Penta.
“Lo que pasa es que estamos en el peor de los mundos. La güeá de los teléfonos, he hablado con los abogados y con otros abogados y me han dicho ‘actúa como si la güeá estuviera pinchada’, yo no hablo nada por teléfono, todo como acá, en vivo” (sic), le explica a Bravo la voz de radio más escuchada en Sanhattan.
El magistrado vuelve a la carga, esta vez para saber si en el siguiente directorio de Pentavida (eran mensuales), en agosto, Bravo asistió. Lavín Junior dijo no recordar, aunque antes había hecho notar que la mano derecha de su padre tenía asistencia muy cercana al 100%, lo que le recordó el magistrado.
“Imagino que sí (estuvo), pero no sé, es que no recuerdo porque usted me pone una pregunta complicada porque no sé cuándo renunció el señor Bravo, se me pierden las fechas”, retrucó Lavín hijo.
El testigo
Ante la insistencia del magistrado, Lavín optó por asegurar que el caso Bravo se veía “aguas arriba” y que él ha tratado de mantenerse al margen de lo que no le corresponde.
Lavín Subercaseaux todo ese rato se refiere a la reunión del 7 de septiembre, que ocurrió 10 días después que el SII denunciara a la dupla Lavín-Délano por delitos tributarios, el 26 de agosto. Justamente, el 27 de agosto Lavín junior se refirió por última vez en su programa al caso. Ese día dijo que confiaba en su padre y que éste siempre había respetado la ley.
Ante la definición tajante de mantenerse al margen que hizo Lavín junior, el magistrado le lanzó la pregunta más compleja y que tendría una respuesta sorpresiva. “Si dice que siempre se mantiene al margen, que no recuerda, ¿por qué su papá dice que lo llevó de testigo?”.
En efecto, en la reunión de marras del 7 de septiembre en casa de Bravo, Lavín padre le dice a éste que le pagarán los dineros que le deben y que para que tenga confianza le trajo a un testigo (su hijo).
La respuesta de Lavín junior al juez ayer fue: “Es que no me puedo hacer cargo de declaraciones de mi papá, si él dice eso pregúntele a él, yo fui de nuevo para acompañarlo en una situación de una persona que estaba en problemas”, cerró el conductor de ‘Información Privilegiada’, programa al cual no asiste hace varios días.
Padre e hijo no es lo mismo
Al salir de tribunales, Lavín Subercaseaux enfrentó, ya más calmo, a los periodistas. Sus respuestas directas revelaron, en apariencia, su distancia de lo ocurrido con su padre. “Siempre supe que (Penta) daba plata, pero no sabía detalles, no soy político, no tengo afiliación política, no tengo nada que ver con la UDI, que es el principal partido financiado, no era mi tema tampoco. Sabía que era financiamiento, y suponía (que eran) legales”.
Luego les pidió a los periodistas que distinguieran entre su padre y él. “El caso no es mío, quiero pedir una cosa: lo mismo he dicho en el programa de radio, una cosa es lo que le pasa al padre y otra la que le pasa al hijo, este caso no es mío, estoy aquí conversando abiertamente con ustedes porque me grabaron sin preguntarme en una reunión, que me encantaría no haber asistido, para ser honesto, y, bueno, así sucedió, pero el caso no es mío”, explicó.
Una periodista le recordó su frase célebre en la reunión con Bravo y su padre, en que señala que el fiscal Gajardo “es loco y ambicioso además”.
“Es la farándula, porque puedo decirte no andís rápido en auto, no seai loco, una cosa así”, explicó, agregando que en su opinión “el fiscal está haciendo su trabajo, está haciendo lo que tiene que hacer”.
Al final le recordaron que Bravo aseguró que había sido amenazado por Délano y Lavín. ”Tendría que preguntárselo a él, uno nunca es objetivo para opinar de los padres, pero no me calza, no lo sé… nunca ha habido estilo matonesco”.
