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Marcel elude plantearse como carta presidencial: “Mi interés es sacar la economía adelante” PAÍS

Marcel elude plantearse como carta presidencial: “Mi interés es sacar la economía adelante”

Además cree que la inversión repuntará de forma más robusta de lo previsto y llama a sacar a la “economía de la arena política”. El titular de Hacienda cree que cuando a los políticos se me les mete el “bicho” de ser Presidente “cambian mucho su forma de actuar”.


Aunque el ministro de Hacienda, Mario Marcel, descartó tener ambiciones presidenciales, asegurando que su prioridad es sacar la economía adelante, el manejo de la economía y la valoración positiva que registra en las encuestas, lo ha posicionado como un rostro presidenciable para 2025.

Consultado sobre si, con un mejor clima económico y de negocios, evaluaría una potencial candidatura a la Presidencia de la República, respondió que “lo he señalado bastantes veces. Mi ambición hoy es sacar esta economía adelante y cualquier otra cosa no es más que un distractor e invitar a un conflicto que dificulte que pueda cumplir esta labor”.

“Conozco a hartos políticos, y cuando se mete ese ‘bicho’ en la cabeza, cambia mucho su manera de actuar y cómo los ve el resto del mundo. Lo que quiero hacer es seguir trabajando en la manera en que lo he estado haciendo hasta ahora”, aseguró.

Optimismo

Luego de que el Ipom del BC de esta semana proyectara un mayor crecimiento para este año y confirmara los “brotes verdes” proyectados por Hacienda, a contrapelo de muchos en el mercado, Marcel cree que la inversión repuntará de forma más robusta de lo previsto y llama a sacar a la “economía de la arena política”.

“Las proyecciones que teníamos desde septiembre del año pasado, tanto para 2023 como 2024, fueron en su momento calificadas de optimistas. Incluso hubo una columna que hablaba de que vivíamos en un mundo paralelo respecto de la realidad económica del país. Ahora podemos constatar que esa realidad estaba mucho más cerca de nuestras proyecciones que de las del mercado o del propio BC”, expresó.

“El problema de muchas estimaciones que erraron tiene que ver con tres factores. Primero, una inercia con que tiende a mirarse la economía. Se hicieron proyecciones demasiado marcadas por el pasado reciente y no se tomó en cuenta que la economía va evolucionando, ajustándose, resolviendo problemas. Segundo, se prestó poca atención a la naturaleza misma del ajuste macro, que fue más eficiente que en otras ocasiones al concentrarse en el consumo como el componente del gasto donde se habían generado los desequilibrios. Tercero, en el afán por marcar ciertos puntos que son álgidos en el debate público y político, se sobreponderaron factores que, siendo importantes, no inciden tanto sobre el funcionamiento de la economía en los plazos más cortos. Esto ha tendido a generar este sesgo pesimista sobre la economía, sobre su dinámica y las proyecciones que espero que a partir de ahora comience a corregirse”.

En ese sentido, Marcel apuntó a que la idea del estancamiento y de la supuesta indiferencia del gobierno frente al crecimiento ha estado en el centro del debate público en los últimos dos años.

“Muchas personas hablaron de crisis o estancamiento todo el año pasado, sin siquiera mencionar el hecho de que la economía tenía que hacer un ajuste para bajar la inflación, cuestión que era evidente para cualquier economista. Es el momento para que todos recalibremos la manera en que se ha estado conduciendo el debate económico en Chile y saquemos a la economía de la arena política, que no le hace bien ni a la economía ni a la política”.

Polémica

Frente a la polémica comparación que realizó el economista Klaus Schmidt-Hebbel entre el Presidente Gabriel Boric y el ex Presidente Salvador Allende, Marcel expresó que “esa comparación la veo como algo anecdótico, no ha sido seguida por nadie”.

“Pero vale la pena contrastar el tono del debate político con la realidad que surge de mediciones y encuestas. Por ejemplo, el indicador de incertidumbre que calcula el BC viene bajando de manera significativa desde hace varios meses y hoy está por debajo de los niveles previos al estallido social. También desde el lado de las expectativas, el Indicador Mensual de Confianza Empresarial (IMCE) ha venido mejorando sistemáticamente desde hace meses. Los indicadores de confianza de los consumidores, con sus altos y bajos, también muestran una recuperación. Veo una brecha entre el tono del debate público en torno a la economía y lo que muestran distintos actores a través de estos indicadores”, dijo.

En cuanto a la sustentabilidad del actual crecimiento, Marcel aseguró que la política fiscal continuará su trayectoria de consolidación este año y el próximo.

“Nuestra meta es de un déficit estructural de 1,9% del PIB versus el 2,6% del 2023. Lo que es cierto es que estamos poniendo un énfasis mayor en la inversión en infraestructura que lo que se hizo el año pasado y eso puede ayudar a recuperar la Formación Bruta de Capital Fijo”.

“Como contexto, hay que considerar que esta última parte desde un punto relativamente bajo para 2024, dado el retroceso que tuvo en la segunda mitad del año. Por otro lado, tendremos condiciones financieras que van a mejorar por el hecho de que la política monetaria se va normalizando, van bajando las tasas de interés y debería ir mejorando el acceso al crédito, lo que es fundamental para la inversión. También están los indicadores de incertidumbre que mencionamos y, por último, está este mayor impulso desde el lado de la inversión en infraestructura pública. Sabemos también que el sector construcción está muy ahogado por distintos factores, por lo que seguimos impulsando medidas para estimular especialmente el crédito hipotecario. Entonces, diría que el 2024 no está para nada jugado en materia de inversión”.

Frente a un posible crecimiento de 3% para 2024, Marcel señaló que “queremos ser realistas en nuestras proyecciones”.

“La credibilidad se gana siendo serios y evitando seguir las oleadas de la discusión pública. Estamos revaluando el escenario macroeconómico de cara al Informe de Finanzas Públicas que se publicará en mayo y ahí tendremos una nueva proyección. No obstante, no preveo grandes cambios respecto de nuestra proyección anterior”.

Desconfianza empresarial

Marcel además restó importancia a los reportes sobre una supuesta desconfianza empresarial.

“Acá no ha habido ningún colapso de la inversión. En 2022 la inversión creció un poco menos del 3% y en el 2023 cayó un 1%, en medio del escenario más adverso en términos de condiciones financieras que hemos tenido en mucho tiempo. El comportamiento de la inversión en este período no ha sido muy diferente a la de otros ciclos. Hay señales de recuperación hacia el futuro según el catastro de proyectos de inversión de la Corporación de Bienes de Capital, especialmente en 2025. Pero siempre es posible que la situación política, confianza… puedan influir en decisiones de más largo plazo”, dijo.

El ministro habló de “un nivel bastante normal de incertidumbre para nuestra economía”, aunque agregó que “esto no obsta que queramos -y ayude- reducirla aún más”.

“Hay que decir también que Chile es un país que requiere más recursos. Chile tiene un problema en materia de finanzas públicas. El ritmo de crecimiento de la demanda por recursos públicos derivado de cambios demográficos y de prioridades en la sociedad no va al mismo ritmo en que crecen los ingresos. Ese es un tema que sólo se va a atenuar cuando haya una respuesta robusta y persistente. Si no hay reformas, el problema no va a desaparecer y perseguirá a gobiernos siguientes”.

Asimismo, señaló que no se puede juzgar a un gobierno por lo que diga o piense algún integrante de la coalición política que lo sustenta.

“Los gobiernos hablan por sus actos, por las decisiones de política pública que toman. Estoy seguro de que en todos los gobiernos ha habido una diversidad de opiniones respecto del empresariado, incluyendo el gobierno anterior. Pero lo importante es qué es lo que se va haciendo. Este gobierno ha tomado una serie de temas que estaban en la discusión durante muchos años, respecto a los cuales se hizo muy poco, y tiene hoy iniciativas sustantivas para hacerse cargo de esos problemas, como es el de los permisos para las inversiones”.

El valor del crecimiento

Marcel además aludió al tema del valor del crecimiento económico.

“Es cierto que en el programa de gobierno no había mucha referencia al crecimiento. Es cierto que durante un buen tiempo se pensó que la economía crecía sola, que eran tantas las oportunidades de ganancias que la economía funcionaba igual, independientemente de lo que pasara con la política pública”, admitió.

Sin embargo, “la idea de que mejorar las condiciones materiales de vida de las personas depende también de que la economía se vaya expandiendo, es algo que se ha hecho bastante claro desde el inicio de este gobierno”.

“Por cierto que durante una primera etapa nos tuvimos que dedicar a estabilizar a la economía, porque la inflación se estaba ‘comiendo’ el poder adquisitivo de los hogares. Despejado ese tema, la agenda de crecimiento está ahí presente. El pacto fiscal tiene 36 iniciativas para estimular el crecimiento. A esta altura nadie podría decir que es un tema frente al cual el gobierno sea indiferente. Por supuesto, es importante que el crecimiento sea sostenible desde el punto de vista ambiental, que sea inclusivo para que llegue a todas las personas”, insistió.

“Ha sido un aprendizaje que va mucho más allá de lo que se ha discutido durante el actual gobierno. Desde hace por lo menos una década que este tema está dando vuelta en el pensamiento progresista. A modo anecdótico, recuerdo que a las dos semanas de haber llegado al Banco Central como consejero, el entonces senador Carlos Montes me invitó a una conversación con los senadores del Partido Socialista para hablar sobre crecimiento. Fui con mucho entusiasmo a la reunión porque me pareció valioso que se discutiera el tema. Desgraciadamente, se generó todo un escándalo porque un consejero del BC asistía a una reunión política, pero lo importante en perspectiva es que ya en aquel entonces, en 2015, estaba activándose una discusión sobre crecimiento dentro del mundo progresista”.

Para Marcel, el crecimiento es parte de una agenda económica que busca sostener el bienestar de la sociedad sobre bases sólidas.

“El crecimiento también es progresista en la medida que sea sostenible e inclusivo. En eso nuestra sociedad ha ido evolucionando y elevando sus estándares ambientales; ha ido fortaleciendo los sistemas de protección social y el mundo ha evolucionado en la dirección de eliminar parte importante de estas tensiones. Producir de manera sostenible es hoy una ventaja comparativa importante”, dijo.

“A propósito del pesimismo, se ha ido instalando la idea de que no podemos hacer más en muchos temas económicos y eso no es así. El 2025 vamos a tener una economía más estable y será mejor que la de 2024, entre otras cosas por los temas de inversión que comentamos. Una economía que, al mismo tiempo, va a estar haciendo una transición a una mejor perspectiva de mediano plazo, si es que logramos avanzar en todos los temas que están dentro del pacto fiscal, entre ellos estos temas de permisos para inversiones, por ejemplo. Por lo tanto, vamos a tener una perspectiva mucho más positiva no solo para el 2025, sino que también para los años que vengan”, aseguró.

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