La norma prevé que cuando en la evaluación se identifique la insuficiencia en el nivel de desempeño, el personal se incorporará a programas de regularización y tendrá la oportunidad de someterse a una segunda y hasta una tercera evaluación. En los casos de que no exista un resultado suficiente en la tercera evaluación, los maestros perderán su plaza.
El Senado de México dio esta madrugada la aprobación definitiva a la Ley General del Servicio Profesional Docente, con lo que queda completada la reforma constitucional en materia educativa promulgada en febrero por el presidente Enrique Peña Nieto.
Tras una discusión de casi ocho horas, los senadores se pronunciaron por 63 votos contra 57 a favor de la ley, que ya había sido avalada el 1 de septiembre por la Cámara de Diputados.
Horas antes de la aprobación definitiva, los senadores habían aprobado la norma en lo general por 102 votos a favor y 22 en contra, pero con alrededor de 30 reservas formuladas fundamentalmente por el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) y en menor medida por el conservador Partido Acción Nacional (PAN).
Sin embargo, ninguna de las reservas prosperó y en la votación final el PAN sumó fuerzas con el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) para aprobar la legislación, que era la última de las tres leyes secundarias a la reforma educativa que estaba pendiente de obtener el aval legislativo.
Con ello, la norma fue enviada al Ejecutivo para su promulgación, y su entrada en vigor está prevista para dentro de dos años.
La Ley General del Servicio Profesional Docente establece la evaluación como el principal instrumento para el ingreso, permanencia y promoción laboral del personal del sistema educativo nacional.
La norma prevé que cuando en la evaluación se identifique la insuficiencia en el nivel de desempeño, el personal se incorporará a programas de regularización y tendrá la oportunidad de someterse a una segunda y hasta una tercera evaluación.
En los casos de que no exista un resultado suficiente en la tercera evaluación, los maestros perderán su plaza, excepto los que estén en servicio con nombramiento definitivo a la entrada en vigor de la ley, que serán readscritos a otras áreas.
La evaluación es el aspecto más contestado por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), que ha realizado manifestaciones y bloqueos de carreteras en rechazo a la reforma educativa y que ha advertido de que impedirá su aplicación.
