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El adiós de Montillo Opinión Crédito: Photosport

El adiós de Montillo

Pablo Flamm
Por : Pablo Flamm Periodista deportivo
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El lunes 31 de noviembre, Montillo habló largo y concluyente en la radio. Ahí despachó una frase categórica: “He decidido no renovar con la U”. Terremoto para la dirigencia que quedaba señalada, y de paso junto con el nuevo técnico Rafael Dudamel, como los posibles responsables de la partida del ícono laico. Porque Walter Montillo es uno de los pocos futbolistas en la actualidad de nuestro país que puede generar adhesiones no solo en sus hinchas, pues tiene el respeto de todos quienes siguen la actividad día a día. Eso se lo ganó por el respeto que siempre ha mostrado por sus rivales y compañeros, por la entrega en cada partido y porque en más de una oportunidad depuso momentos familiares complejos y difíciles para estar en la cancha.


Jueves 3 de noviembre y Walter Montillo anunció lo que más le duele y siente un futbolista. El momento de decir hasta acá llegó. Todo jugador sabe que ese instante es fuerte, algunos lo preparan y otros toman la decisión de un día para otro. Algunos son retirados por técnicos, dirigentes y lesiones.

Pero el caso de Montillo es especial. Sus números en el torneo son muy buenos, líder de asistencias, titular indiscutido y un socio de fuste para el goleador del certamen, como es Joaquín Larrivey. De las capacidades y calidad del argentino nadie podría dudar. Absolutamente nadie.

Como tampoco de su identidad y entrega por la U. En esta segunda etapa, llegó como un verdadero rock star, sitial que él jamás solicitó o se encargó de creer. Las imágenes de Montillo subiéndose al avión en Buenos Aires y la cantidad de hinchas que llegaron hasta el aeropuerto, solo para obtener una selfie o cantarle por su retorno, hacían y presagiaban que el “salvador”, “el buque insignia” (como lo bautizó Markarián en la primera etapa azul), cumpliría muchos de sus anhelos con la casaquilla del romántico viajero. Uno de ellos, finalizar su carrera con la enseña azul, claro que lo hará, pero no de la forma que imaginó y soñó.

[cita tipo=»destaque»]Toda la semana fue un cúmulo de hipótesis y teorías respecto al futuro inmediato de Walter Damián Montillo. Hasta que él decidió dar punto final al tema. Jueves 3 a las 16.04 se emitía un video institucional donde el jugador decía: “Juego hasta el 31 de enero y me retiro”. Algunos querrán seguir buscando responsables de este alejamiento, sobre el que por ahora sigue siendo conocida solo una palabra. La del jugador.[/cita]

El lunes 31 de noviembre, Montillo habló largo y concluyente con Radio ADN. Ahí despachó una frase categórica: “He decidido no renovar con la U”. Terremoto para la dirigencia que quedaba señalada, y de paso junto con el nuevo técnico Rafael Dudamel, como posibles responsables de la partida del ícono laico. Porque Walter Montillo es uno de los pocos futbolistas en la actualidad de nuestro país que puede generar adhesiones no solo en sus hinchas, pues tiene el respeto de todos quienes siguen la actividad día a día. Eso se lo ganó por el respeto que siempre ha mostrado por sus rivales y compañeros, por la entrega en cada partido y porque en más de una oportunidad depuso momentos familiares complejos y difíciles para estar en la cancha.

Y no se trata de halagar o solo alabar, es intentar a lo menos reflejar en alguna medida lo que provoca el trasandino.

Toda la semana fue un cúmulo de hipótesis y teorías respecto al futuro inmediato de Walter Damián Montillo. Hasta que él decidió dar punto final al tema. Jueves 3 a las 16.04 se emitía un video institucional donde el jugador decía: “Juego hasta el 31 de enero y me retiro”. Algunos querrán seguir buscando responsables de este alejamiento, sobre el que por ahora sigue siendo conocida solo una palabra. La del jugador. Dudamel esbozó alguna respuesta diplomática, algo tan lógico de esperar, pero con el tiempo seguramente se sabrán más detalles de la partida del enganche.

La U está en una situación poco cómoda y deberá pronto comenzar a sumar puntos para asegurar cupo a copa internacional. Hoy, está más cerca de abrochar en la Sudamericana y, así, evitar nuevamente complicaciones con la tabla de los promedios para el descenso.

Y surgen muchas interrogantes, ya que el rendimiento de Montillo no es excusa, es un jugador megaprofesional, pero cómo logrará uno de sus futbolistas más determinantes estar con todas las luces encendidas, sabiendo que tiene fecha de expiración. Habrá que verlo fecha a fecha, pero reitero, estoy seguro y convencido de que Montillo quiere terminar de la mejor forma, tal como lo ha venido haciendo hasta ahora en el torneo.

La decisión final es tan personal, que cuestionarla me parece un ejercicio un poco inoficioso. ¿Tiene cuerda para seguir jugando? Absolutamente. A sus 36 se mantiene en primer nivel y podría seguir una o dos temporadas más. A mí por lo menos me encantaría verlo jugar un rato más. Y muchos futbolistas cuentan que, a veces, se arrepienten de tomar la determinación del retiro. Les pasa y seguirá ocurriendo a muchos de ellos.

El adiós de Montillo será especial y él lo sabe. Habrá lágrimas y emociones. Se ganó un sitial importante en la historia de la U y el fútbol chileno. Un hombre sencillo y honesto. Éxito, Walter… la vida viene con más cosas bellas para ti.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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