La Cancillería aclaró que la aceptación de la renuncia que presentó el funcionario luego de que el fiscal Ricardo Fiegelist comprobara que vendió visas a sobreprecio a ciudadanos chinos, no impide que se aplique la medida de destitución.
La ministra de Relaciones Exteriores, Soledad Alvear, aplicó -por considerarla ajustada a derecho- la medida de destitución al Primer Secretario Enrique Subercaseaux Mc Gill, cónsul de Chile en Shaghai.
De esta forma, acogió lo propuesto por el fiscal instructor, Enrique Fiegelist, quien investigó -desde noviembre último- las denuncias de cobro excesivo de visas en el Consulado de Shanghai, hechos que el Ministerio consideró constitutivos de una grave infracción a la probidad administrativa.
Al mismo tiempo aceptó la renuncia que le había presentado el funcionario, en conformidad a lo que le ordenaba el Estatuto Administrativo.
No obstante, la Cancillería aclaró que la aceptación de la renuncia no impide que se aplique la medida de destitución.
De acuerdo a las disposiciones legales, la resolución de destitución está actualmente siendo notificada a Enrique Subercaseaux, para que pueda hacer uso del derecho a interponer los recursos que le franquea la ley.
La resolución de renuncia, en tanto, fue enviada a la Contraloría General de la República para su tramitación correspondiente.
Previamente, con ocasión del dictamen del fiscal instructor, éste presentó la denuncia penal correspondiente a la Corte de Apelaciones de Santiago, que a su vez derivó el caso a la actual ministra del caso GATE, Gloria Ana Chevesich.
Molestia diplomática
Trascendió que en la Cancillería existe molestia por la actitud discola que ha tenido Enrique Subercaseaux a la hora de abordar el caso, pues el ex funcionario diplomático hizo caso omiso a las últimas solicitudes del fiscal Fiegelist, quien solicitó en su momento su regreso al país con el fin de ser notificado personalmente de los cargos que había elevado en su contra.
"La situación no corresponde, pero sí se le está destituyendo la respuesta es elocuente", comentó una fuente que conoció de cerca el proceso.
Respecto al paradero del hijo de Mary Rose Mc Gill, hasta ahora existirían dos versiones: que se encuentra en Estados Unidos y, la otra, que no se habría movido de Shanghai. Esto, en todo caso, es un tema menor para el Ministerio de Relaciones Exteriores, pues la notificación de que había sido destituido se habría hecho a través de los apoderados nombrados por el ex funcionario diplomático.
El consejero Ricardo Fiegelist, quien trabajó durante tres meses en la investigación desde que se conocieron las denuncias hecha por los propios ciudadanos chinos, elevó cargos por supuestos cobros excesivos de visas acreditando -según consta en el expediente- que estos se excedieron en un 300 por ciento más del valor real del documento, que en la actualidad cuesta cerca de 30 mil pesos.
El fiscal también habría establecido que "hubo apropiación indebida de recursos particulares", lo que significa que las personas que adquirieron las visas se vieron perjudicados con el ilícito.
En todo caso cercanos al proceso explican que "ahora será la justicia que tendrá que establecer su hubo o no delito".
Una señal
Quienes conocen el servicio exterior explicaron que la destitución de Enrique Subercaseaux del servicio exterior "es una fuerte señal que ha dado la Cancillería y el gobierno al aplicar la máxima sanción que está establecida en la ley a una conducta que aparentemente aparece como reprochable".
Agregaron que "en el actual contexto de los temas que están en la agenda, no cabe duda que está reacción dice relación con la conducta que debe tener toda institución cuando se conocen situaciones irregulares".
También se aclaró que la sanción aplicada a Subercaseaux "no es una persecución política. El fiscal fue imparcial para realizar el sumario manteniendo absoluta reserva de su trabajo".
Explicaciones
En el ámbito de las relaciones con China, la Cancillería -a través de su embajador, Benny Pollack- ahora deberá realizar una presentación formal a las autoridades de ese país informándoles de la destitución de Enrique Subercaseux y a la vez dar las excusas correspondientes por este affaire diplomático ocurrido en el consulado de ese país.
Enrique Subercaseaux, quien al comienzo de la investigación negó cualquier vinculación con los hechos, asegura una fuente, "con el correr de la investigación comenzó a colaborar con el fiscal".
"Es más, reintegró los recursos obtenidos por la venta de visas a la Cancillería. Lo que implica un reconocimiento explicito de la falta", explican.
También trascendió que Subercaseaux, pese a su ausencia del país, sí hizo sus descargos al consejero Fiegelist.
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