Frei Ruiz-Tagle hizo gallito con ex Mandatario y comprometió apoyo a todo el gobierno de Bachelet
Su inasistencia no pasó inadvertida en la sede del Ejecutivo, donde fue entendida como una clara señal de “molestia” del ex Presidente con las declaraciones de Bachelet el martes. Fue evidente el esfuerzo de las autoridades y dirigentes por esquivar el tema, no ahondar en ello, argumentando que no conocían las razones. El timonel de la DC, Ignacio Walker, optó por precisar que el ex gobernante “sabe que siempre es bienvenido”.
Palabra sacan palabras o, a veces, generan ausencias. El ex Mandatario Ricardo Lagos no llegó al acto que esta mañana se realizó en La Moneda y que encabezó la Presidenta Michelle Bachelet, para conmemorar los 50 años del triunfo en las urnas de la “Revolución en Libertad” de Eduardo Frei Montalva. Se notó, su inasistencia marcó la actividad, fue el comentario entre los asistentes y acrecentó la sensación política de cierta lejanía del ex Presidente con el gobierno de la Nueva Mayoría.
Llegaron desde el ex Presidente Patricio Aylwin, el clan Frei en pleno, hasta la mayoría de los actuales ministros y los timoneles de la Nueva Mayoría, incluido el jefe del PC, Guillermo Teillier. Cuando Bachelet apareció en el encarpado patio de Los Naranjos, ya era evidente para todos que Lagos Escobar no llegaría.
Hay que recordar que la semana pasada el ex Presidente durante su exposición en ICARE hizo una crítica a la actual administración, cuando precisó que en materia de concesiones “falta voluntad política” y que los “últimos ocho años han sido perdidos” en este ámbito. Si bien no lo dijo abiertamente, pero esa línea de tiempo abarca completo el primer gobierno de Bachelet.
Sus palabras entonces generaron ruido, pero sobre todo reflotaron la suerte de distancia política soterrada que ha existido entre el laguismo y el bacheletismo.
Este martes en la noche, durante una entrevista en ‘El Informante’, se le preguntó a Bachelet sobre las críticas de Lagos y de manera sutil pero clara dio a entender que ella no tenía un estilo de liderazgo autoritario: “Yo tengo una manera de ser, de tomar las decisiones, más dialogante”.
La ausencia de Lagos esta mañana no pasó inadvertida para La Moneda, donde fue entendida como una clara señal de “molestia” del ex Presidente con las declaraciones de Bachelet el martes. Fue evidente el esfuerzo de las autoridades y dirigentes por esquivar el tema, no ahondar en ello, argumentando que no sabían razones para la inasistencia, incluido el timonel de la DC, Ignacio Walker, quien optó por precisar que el ex Mandatario “sabe que siempre es bienvenido”.
Una prueba del revuelo que generó la ausencia de Lagos está en que, al poco rato de terminado el acto en La Moneda, desde la Fundación Democracia y Desarrollo del ex gobernante se mandó un comunicado oficial justificando su inasistencia: “Precisamos que la invitación a la ceremonia fue enviada por parte de la Presidencia de la República el día de ayer miércoles, 3 de septiembre, a las 8:31 de la mañana. El ex Presidente Lagos intentó realizar los ajustes a su agenda, pero lamentablemente le fue imposible postergar los compromisos adquiridos previamente, razón por la cual presentó sus excusas a las 13:40 del día de ayer”.
Las invitaciones a la ceremonia corrieron por cuenta de la Fundación Frei, de la DC y la Presidencia. En la falange aseguraron que Lagos no se disculpó con nadie de la directiva y en el gobierno no quisieron insistir en el momento exacto en que fueron notificados de la ausencia, aunque algunos se enteraron anoche tarde y la mayoría esta mañana.
Durante el acto, habló el ex Presidente Eduardo Frei Ruíz-Tagle, quien como correspondía recordó el legado de su padre, pero aprovechó el momento para remarcar su alineamiento absoluto con Bachelet, haciendo un gallito notorio con lo que se ha visto de Lagos las últimas semanas.
“Presidenta, tenga la certeza que todos los DC la están apoyando, cuente con nosotros (…). Y obviamente cuente conmigo, que la voy a apoyar en todo su gobierno”, sentenció Frei, quien arrancó aplausos en ese momento.
No solo eso. Hizo un llamado de atención ante las tensiones que han existido con sectores más conservadores de la DC y el excesivo chovinismo partidario que algunos dirigentes como Gutenberg Martínez han desplegado estos meses, alimentando tesis sobre una suerte de camino propio de la falange en el mediano plazo.
Recordó las tensiones que vivió Frei Montalva en los últimos años de su mandato, sobre todo cuando la DC trató de salirse del gobierno, y advirtió, en tal sentido, que “el partido no puede repetir errores históricos como los de querer abandonar el gobierno”.
La Presidenta Bachelet hizo lo propio en el coqueteo con la DC y, durante todo su discurso, hizo un paralelo entre los desafíos reformistas de Frei Montalva y los que enfrenta hoy su gobierno para sacar adelante el programa.
“La voz del candidato consecuente, el que no alteró su programa ni lo que prometió en campaña, es la voz de Frei Montalva (…) un político consecuente es el que honra la palabra empeñada ante la gente (…) cumplir con el pueblo era una exigencia ética en 1964 y lo es el 2014 y yo cumpliré con ella”, recalcó Bachelet.
