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Gutiérrez culpa a la «envidia política» de las críticas al embajador Contreras

Gutiérrez culpa a la «envidia política» de las críticas al embajador Contreras

«Como no aparecemos con gastos reservados ni haciendo chanchullos en campañas electorales, no aparecemos mal utilizando recursos públicos, aparecemos como los santos de estas campañas electorales», sostuvo el diputado comunista.


El diputado del PC, Hugo Gutiérrez, sostuvo que la polémica generada tras las declaraciones del embajador de Chile en Uruguay, Eduardo Contreras, se produce por «envidia política» y por desviar la atención de los temas importantes que se discuten como el Pentagate y Cascadas.

El diplomático sostuvo en una entrevista a un medio uruguayo que detrás de los últimos atentados terroristas estaba la ultraderecha, que está en contra de las reformas que está impulsando el gobierno de Michelle Bachelet.

«Yo creo que en estos tiempos se nos busca siempre queriendo enlodarnos con circunstancias pocos significativas», sostuvo el parlamentario comunista a radio Cooperativa.

Gutiérrez explica que «cuando hablamos de casos como Penta sin duda tiene cierta impotencia y que haya sido dejado de lado por las palabras de Eduardo me parece que hay una manipulación clara y evidente».

El legislador precisó que siempre hay una búsqueda de criticar al PC y «como no aparecemos con gastos reservados ni haciendo chanchullos en campañas electorales, no aparecemos mal utilizando recursos públicos, aparecemos como los santos de estas campañas electorales».

«Por supuesto hay que buscar una forma de enlodarnos y ensuciarnos y encuentran en las palabras de Eduardo algo que pueden rebosarnos», añadiendo que «yo creo que eso es pura envidia política de no poder reprocharnos algo grave y buscar en las palabras de Eduardo una forma de desviar la atención de la opinión pública».

El diputado y abogado también se refirió a las declaraciones en las que Contreras recordó la participación de la DC en el Golpe de Estado de 1973, precisando que «él ha constatado una realidad histórica que puede que a algunos les pese y les moleste».

«Además de ser embajador es un sujeto político, fue abogado de derechos humanos y por supuesto que también tiene una opinión sobre esas temáticas y es un tema que tiene que ser superado», sostuvo.

«No creo que esté a la altura de la conflictividad que ha generado todo el caso Penta, Cacadas y tantos casos que efectivamente deberían tener un mayor reproche social, y creo que lo han tenido, que fijarse en que si Eduardo dijo tal cosa respecto a tal o cual tema que, sin duda, es solamente su parecer», concluyó.

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