En línea con las predicciones del mercado, el Banco Central determinó, en su Reunión de Política Monetaria de octubre, mantener la tasa en 5,25%.
El comunicado del instituto emisor manifestó que las condiciones del mercado externo, en particular el lento ritmo de crecimiento de las economías más desarrolladas y las señales de desaceleración local, aconsejan mantener el guarismo en 5,25%.
Respecto a la situación internacional, el Central sostuvo que las proyecciones de los Estados Unidos y la Eurozona siguen revisándose a la baja, a lo que agrega los recortes en las perspectivas de las hasta ahora más firmes economías emergentes.
«Los riesgos fiscales y financieros de la Eurozona se mantienen elevados y continúa la incertidumbre acerca de cómo se resolverá esta situación. La volatilidad financiera es alta y las condiciones financieras externas se han tornado más restrictivas», afirmó el documento.
«Los bancos centrales de las principales economías han adoptado medidas adicionales para agregar expansividad a su política monetaria, mientras en la mayoría de las economías emergentes se han interrumpido las alzas de tasas y, en algunos casos, se han realizado recortes», agregó.
En el ámbito local, el ente emisor describió que existen señales de desaceleración, incluso por sobre lo esperado en el escenario base del Informe de Política Monetaria.
Finalmente, el documento declaró que «cambios futuros en la TPM dependerán de las implicancias de las condiciones macroeconómicas internas y externas sobre las perspectivas inflacionarias».
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