El diputado PPD Ramón Farías afirmó que el Estado, a través de las autoridades pertinentes, tiene el deber de ocuparse del destino que tendrán más de 400 adultos mayores, luego que 31 centros del Hogar de Cristo cierren sus puertas.
«Si bien nos encontramos frente a una institución privada, el Estado, a través de las autoridades pertinentes, tiene el deber de ocuparse de estos cientos de adultos mayores cuyo destino aun es incierto», explicó.
Igualmente, el legislador sostuvo que solicitó una reunión con el ministro de Desarrollo Social, Joaquín Lavín y la directora del
Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), Rosa Kornfeld, para que den a conocer las acciones que emprenderá el Gobierno.
El parlamentario dijo que se reunió con miembros del Sindicato de Trabajadores de la institución, «quienes me informaron sobre los principales problemas que está provocando esta crisis financiera en el destino de los beneficiarios y de los mismos funcionarios».
«Es un escenario muy complejo, porque el cierre definitivo de centros como los de Lampa y San Bernardo, que son los más grandes del Hogar de Cristo, hará necesario el traslado de esos adultos mayores. Sin embargo, y según se nos ha informado, los nuevos centros, como los de Fundación Las Rosas, no cuentan con las condiciones de infraestructura ni de atención profesional adecuada», precisó.
El diputado Ramón Farías sostuvo que los trabajadores afirmaron que existen muchos abuelos que tienen problemas de tipo psicogeriátricos que no serán aceptados en otras fundaciones, porque necesitan cuidados especiales.
El legislador también manifestó su preocupación por los trabajadores que serían desvinculados de la institución, que según cifras del sindicato, alcanzan los 350 funcionarios.
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