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Psicoanalista italiano revisa la figura del padre, desde la Antigüedad hasta el presente Luigi Zoja será parte del Festival Puerto de Ideas

Psicoanalista italiano revisa la figura del padre, desde la Antigüedad hasta el presente

Para este pensador, la paternidad es una adaptación reciente, aún insegura y precaria. La figura paterna es «central, no es invención de un tiempo, de una sociedad o cultura: es arquetipal, potencialmente necesaria para cada psique», asegura en esta entrevista. Estará el sábado 14 de abril en la Biblioteca Regional de Antofagasta.


Una charla sobre la figura del padre dará el pensador italiano Luigi Zoja (Varese, 1943) en la próxima edición del Festival Puerto de Ideas de Antofagasta, que se realizará el próximo 13, 14 y 15 de abril en esa ciudad nortina.

Zoja acaba de publicar en español al respecto su obra «El gesto de Héctor. Prehistoria, historia y actualidad de la figura del padre» (Taurus, 2018), una versión ampliada del original publicado en el año 2000.

Este ensayo es considerado por mucho como trascendental para entender la figura paterna en la historia occidental y su rol en la actualidad, según la reseña editorial.

Reinterpretación histórica de la paternidad

Este intelectual ha desarrollado su carrera en Zúrich, Nueva York y actualmente en Milán. Fue presidente del Centro Italiano di Psicologia Analitica (1984-1993), y de la International Association for Analytical Psychology (1998-2001) que agrupa a los psicoanalistas junguianos de todo el mundo. Es autor de numerosas obras traducidas a catorce lenguas, entre las que destacan Drogas: adicción e iniciación. La búsqueda moderna del ritual (Paidós, 2003), Paranoia. La locura que hace la historia (FCE, 2013), y La muerte del prójimo (FCE, 2015).

Este libro se ocupa de los orígenes de la figura del padre desde un punto de vista histórico, antropológico y psicológico. Zoja lee algunas figuras míticas de la antigüedad clásica -Ulises, Aquiles, Eneas…- como imágenes arquetípicas del padre y modelo de las paradojas a las que este se enfrenta.

«Héctor se quita el casco, lo pone en el suelo y puede abrazar al niño. Formulando un deseo para el futuro, eleva a su hijo hacia lo alto con los brazos y con el pensamiento. Este gesto será, para siempre, la marca del padre», escribe.

De esta manera, el italiano realiza una reinterpretación vibrante de la paternidad desde Homero y Virgilio hasta el siglo del cine y el totalitarismo.

Luigi Zoja

La ausencia de investigación

Zoja cuenta a El Mostrador que consideró relevante estudiar, desde su especialidad, la figura del padre porque, en sus palabras, «con poquísimas excepciones -aun sí notables, como la de un señor de Nazareth, fundador de la segunda religión monoteísta- parece que todos necesitamos una madre y un padre».

«Sin embargo, cuando empecé mi investigación, cerca del 1990, había diez veces más libros sobre la madre y la maternidad que sobre padre y paternidad. Luego algo sobre el padre se publicó, pero la falta de balance se queda muy grande», comenta.

¿Considera que la figura del padre está en crisis producto de las corrientes feministas actuales o sólo necesita adaptarse?

«Según la reconstrucción contenida en mi texto -y muchos historiadores-, cuando llegan las revoluciones francesa y americana -final del 1700-, ya algunos de sus factores son una crítica a la autoridad del padre», responde.

En cuanto al feminismo, lo señala como un fenómeno del siglo XX, es decir, posterior.

«Además el feminismo no logra uno de sus principales deseos: transformar la sociedad en algo con más inspiración femenina: menos armas, menos guerras, más asistencia social, que es de algún modo una continuación en el público del cuidado maternal privado. Incluso como consecuencia de transformaciones económicas, la sociedad se hace más competitiva, entonces guerrera, a su manera macho-céntrica, y no padre-céntrica».

El padre, figura central

Hoy, para Zoja la figura del padre como símbolo en la cultura contemporánea sigue siendo central.

«No es invención de un tiempo, de una sociedad o cultura: es arquetipal, potencialmente necesaria para cada psique», asegura.

«Pero en la modernidad adquiere una coloración negativa con los -mi término- ‘padres terribles’, los dictadores. No hay correspondientes ‘madres terribles’, que llenen de sangre a la historia, como Hitler o Stalin».

Él recurrió a la figura de Héctor como metáfora de la paternidad inspirándose en «La Ilíada» de Homero, el clásico sobre la Guerra de Troya que data del siglo VII a. C.

«Es decir el poema más antiguo y fundador de Occidente», afirma. «Él es el único que logra ser macho-combatiente, pero a lo mismo tiempo padre».

Con esta visita, Zoja vuelve por tercera vez a Puerto de Ideas, tras venir en 2014, con su ponencia «Paranoia, la locura que hace la historia», y 2016, con «Centauros: mito y violencia masculina», ambas en Valparaíso.

Con relación a su trabajo anterior sobre la paranoia. ¿Cómo ve los fenómenos actuales políticos en relación a la paranoia?

«Estoy preocupado, como muchos», contesta. «El rechazo al ‘Otro’, la búsqueda de enemigos, de chivos expiatorios. Ivan Krastev, uno de los mayores ensayistas del New York Times, escribió que en política, la paranoia esta sustituyendo la ideología. Empecé mi estudio en 2001 -vivia en Nueva York, asistí al derrumbe de las Torres Gemelas- con un vago sentimiento de ese tipo».

Este Festival se presenta en conjunto con Minera Escondida / BHP.

 

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