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Vargas aclaró un partido incierto


Cuando un equipo no camina, y Chile frente a Perú no anduvo como se esperaba, de acuerdo a la historia y a lo que había sido su rendimiento hasta ahora en la Copa América, los problemas suelen ser resueltos por los goleadores. Esos jugadores que, más allá de sus limitaciones, del pobre juego de su cuadro incluso, aparecen en los momentos clave y cuando más se les necesita.

Fue el caso de Eduardo Vargas, protagonista principal y excluyente de un triunfo sin luces ni brillo, pero que, sin embargo, tiene un inmenso valor histórico para un fútbol chileno muy poco acostumbrado a pelear en estas instancias de cualquier certamen.

En el primero, cuando ya el primer lapso se iba, Vargas debe haber anotado uno de los goles más feos de toda su trayectoria. El balón enviado por Sánchez, que dio sobre el vertical luego del desconcierto de Gallese ante la pantalla que hizo Aránguiz, fue conectado por el delantero, sólo que Ascues llegó justo para trabarlo. La pelota, para fortuna de la Roja, quedó ahí mismo y “Turboman” sólo tuvo que empujarla para que traspusiera lentamente la raya.

El segundo, sin embargo, fue un golazo. Digno, por cierto, de una Copa América, de un Mundial incluso. A varios metros del área, intentó lo que en ese momento se antojó un error mayúsculo, porque eran tres o cuatro jugadores lo que corrían acompañando la jugada. Sólo que Vargas no dudó. Desde 30 ó 35 metros metió el derechazo que tomó una increíble trayectoria, porque parecía que el remate se iba a ir elevado cuando, de improviso, bajó para meterse cerca de un ángulo, dejando sin ninguna opción al meta peruano.

Aunque la Roja nunca alcanzó la tranquilidad que le permitiera jugar mejor lo que lo hizo, el golazo de Vargas significaban el triunfo y el paso a una nueva final de Copa América después de casi tres décadas.

En un cuadro de juego discreto, Vargas se alzó como el salvador del equipo y tomó, de paso, el liderato en la tabla de goleadores con cuatro conquistas, superando por ahora a Arturo Vidal y al peruano Paolo Guerrero.

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