El mandatario ecuatoriano también consideró que con la elección de un presidente demócrata en Estados Unidos «podría ser distinta» la relación con la región, pero América «debe contar con su propia fuerza».
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aseguró que «este es el período con menor cantidad de conflictos que ha habido en América Latina, sobre todo en Sudamérica» ya que existe una mayor «voluntad integracionista».
«Lamentablemente se dio este conflicto Colombia-Ecuador, por culpa de Colombia, pero comparativamente este es el período con menor cantidad de conflictos. El desafío es que esa integración se concrete en hechos de beneficio para la población», señaló Correa, en una entrevista publicada este domingo por el diario argentino Página/12.
Correa consideró que esta situación se debe a que «ha habido un cambio de época» con «gobiernos progresistas, empatía entre presidentes y decisión política, con vocación integracionista de nuevo cuño».
«No lo que se vio en los noventa, donde querían convertirnos en un gran mercado. Queremos convertirnos en una gran Nación», advirtió el mandatario ecuatoriano.
De todas formas, insistió en que este proceso fue contrastado por el conflicto con el Gobierno de Álvaro Uribe, desatado el pasado 1 de marzo cuando Colombia realizó una operación militar contra un campamento que la guerrilla colombiana de las FARC había instalado en territorio ecuatoriano donde murieron 26 personas, entre ellas el portavoz internacional de esa guerrilla, «Raúl Reyes».
Sin embargo, la ministra ecuatoriana de Relaciones Exteriores, María Isabel Salvador, confirmó el pasado martes que su país restablecerá relaciones diplomáticas con Colombia esta semana, a nivel de encargados de negocios.
«Hemos dado un paso, fijar las relaciones a nivel de encargados de negocios. Tenemos una frontera muy caliente, es bueno tener comunicación fluida. Pero, para establecer relaciones plenas, vamos a exigir que se aclare plenamente ese ataque», indicó Correa, durante la entrevista realizada en Quito.
«Las bombas eran norteamericanas y, de acuerdo con los informes de nuestra fuerzas armadas, no pueden haber sido arrojadas por aviones colombianos. Tres de los heridos, según informes forenses, con mucha probabilidad fueron rematados en vida. El ciudadano ecuatoriano que murió ahí fue por culatazos en el cuello y no por tiros ni bombas», afirmó.
Correa subrayó que el mundo «tiene que entender que el problema no es Ecuador, que el problema es Colombia», y que «cada vez que se infiltra una patrulla de la FARC en Ecuador, significa que se exfiltró de Colombia».
«Nosotros tenemos 13 puestos militares en la frontera, cuando necesitaríamos (en tiempos de paz) la cuarta parte. Colombia tiene dos. La estrategia de Colombia es resolver el problema desguarneciendo su frontera sur, nos quiere involucrar», lamentó el mandatario, quien consideró que el «problema» en esta situación es el presidente colombiano, Álvaro Uribe.
Por otra parte, Correa consideró que con la elección de un presidente demócrata en Estados Unidos «podría ser distinta» la relación con la región, pero América «debe contar con su propia fuerza».
«Es hasta cierto punto de vista intrascendente cuánto cambiará Estados Unidos. Que no será mucho», manifestó.
EFE
