Señor Director:
La entrada en vigencia de la Ley de Acceso a la Información Pública, hace casi un año y medio, generó gran satisfacción para el país. Las organizaciones de la sociedad civil que trabajamos en esta materia apoyamos la entrada en vigencia de la ley, que ha significado un gran avance. Pero también es cierto que una de las principales críticas desde ese momento apuntaba a las bajas exigencias de la ley al Poder Legislativo, ya que frente al Ejecutivo y los municipios la ciudadanía tiene muchas más herramientas para hacer efectivo el derecho de acceso a la información.
Esta ley ha dado cuenta de un cambio cultural, donde la apertura y publicidad de la información es la norma y donde la ciudadanía cuenta con herramientas para acceder a esta información, que al ser pública le pertenece.
Por eso resulta totalmente contradictoria la Ley Orgánica Constitucional que establece como norma que las sesiones de comisión parlamentaria se realizarán sin público, salvo decisión contraria de la mayoría de sus miembros, ya que atenta en contra de todos los esfuerzos para construir una cultura de la transparencia, y sólo contribuyen a incrementar la distancia entre la ciudadanía y sus instituciones.
María Inés de Ferrari
Directora Ejecutiva Corporación Participa
