Con la permuta de sólo 3,8 hectáreas, para muchos, el sueño de la resistencia a la globalización se diluyó: Nicolasa Quintremán, la líder opositora a la construcción de la central hidroeléctrica Ralco, en el Alto Biobío, cedió ante jugosa oferta de Endesa.
Aunque quedan cinco familias en el Alto Biobío empeñadas en rechazar las ofertas de la multinacional Endesa para el emplazamiento de una represa, el que permuten sus tierras es sólo un compás de espera.
Y es que una de las líderes de la oposición al proyecto, Nicolasa Quintremán se sumó a otras 90 familias relocalizadas en los fundos El Barco y Huaqui, a 170 kilómetros de Los Angeles. Esa negociación no fue fácil y se logró sólo tras la firma de un Plan Asistencial de Relocalización por 10 años, que incluye infraestructura y asesoría técnica y cultural a los indígenas.
La habitante pehuenche permutó sus 3,8 hectáreas a cambio de 77 hectáreas y 200 millones de pesos, marcó el fin de parte de una resistencia de se prolongó por una década.
La marginación de la «resistencia», como denominaban a la oposición al proyecto Ralco, no fue silenciosa: la pehuenche argumentó que los activistas que en algún momento pelearon con ella «la dejaron sola» y que «lucraron con la causa», aludiendo al ex presidente del grupo de Acción por el Biobío, Juan Pablo Orrego.
Ante ello, el activista aseguró que "los endesados reniegan de puro dolor". A la vez, aseguró que su entidad nunca se hizo con la colaboración a la lucha por la reivindicación de la etnia.
La estrategia del Gobierno
Cuando el mandatario articuló la frase "decir no a Ralco, es decir sí al alza de electricidad", no comenzaba una defensa de la multinacional, sino que cerraba el círculo que había comenzado hace meses para dar paso a la construcción de la represa.
El gobierno se empeñó este año en zanjar la disputa, para lo que dio el último paso tendiente a soslayar la oposición de familias pehuenches.
El 5 de abril fue publicado en el Diario Oficial la resolución del ministerio de Economía que creó la Comisión de Hombres Buenos que tasó los predios, lo que a la postre permitirá a Endesa hacerse de ellos previo pago de una indemnización.
La Comisión del gobierno ya entregó un informe que está en manos de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles. La Ley Eléctrica faculta al tribunal respectivo a asegurar que Endesa consiga la «posesión material de los terrenos» una vez que concluya la labor de la Comisión, incluso mediante el uso de la fuerza pública.
Ante ello, la defensa pehuenche mostró su última carta: la presentación de un recurso de protección ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la que fue acogida a tramitación y se dictó una orden de no innovar, pero que, en los hechos, no ha detenido la construcción de la central hidroeléctrica.
___________
