Diputados de la UDI que apoyan a la alcaldesa de Concepción descartaron que existan riesgos para su postulación, luego de la ventaja que tomó el senador Pablo Longueira, quien el martes oficializó sus aspiraciones. Según los promotores de la candidatura de la edil, el mensaje de Van Rysselberghe se centrará en sus fortalezas a nivel regional.
En la UDI existen dos figuras que resaltan como precandidaturas presidenciales: el senador Pablo Longueira, quien ya inició su trabajo electoral anunciando un recorrido por Chile, y la alcaldesa de Concepción, Jacqueline Van Rysselberghe, quien tiene previsto retomar oficialmente su campaña a fines de marzo tras cumplir con su período de postnatal.
En la tienda de calle de Suecia aún no existe un mecanismo definido para elegir al candidato que los representará, ya sea en unas potenciales primarias de la Alianza (muy probablemente frente al empresario de RN Sebastián Piñera) o en una primera vuelta presidencial.
Pese a lo adelantada que está la postulación de Longueira y de lo poco conocida que es la figura de la alcaldesa fuera de su zona, de acuerdo a las encuestas que manejan sus propios adherentes, los diputados gremialistas que promueven su postulación descartan que sea una aventura meramente testimonial.
Los diputados Iván Norambuena y Andrés Egaña, quienes han sido promotores de la campaña de Van Rysselberghe, insisten en que las chances de la edil siguen siendo altas, y que el anticipo de Longueira no la perjudicará. «El análisis nuestro es que ella tiene un porcentaje de aceptación muy alto, en una fracción baja de la población que la conoce, entonces las posibilidades de crecimiento, en la medida que su figura se difunda más, son enormes», sostiene Norambuena.
Por su parte, Egaña no cree que «la precandidatura de Jacqueline adquiera un carácter testimonial. Son dos opciones que están latentes y el partido está conciente que lo que ella ha tratado de proyectar es un liderazgo regional, y si Pablo tiene una propuesta más general, también es un aporte para el partido».
Respecto a la anticipación con que el senador inició sus actividades, Norambuena piensa que «está muy bien. Nosotros siempre hemos creído, e incluso lo hemos conversado con Pablo (Longueira), que mientras más liderazgos estén en acción es mucho mejor para el objetivo que perseguimos, que es representar a la Alianza en la próxima elección presidencial".
Egaña coincide en que «mientras mayor actividad hagan las personas que tienen liderazgo dentro de la UDI, bienvenidos sean. Pienso que todo el trabajo electoral que se pueda adelantar es mejor, así que en ese sentido no veo mayor problema».
De vuelta al trabajo
En la actualidad, la alcaldesa se encuentra alejada de las actividades públicas, producto de estar en su periodo postnatal. Y aunque no ha dejado manifestar que su prioridad es ser reelecta como edil para un tercer periodo por Concepción, sus aspiraciones presidenciales tampoco son un misterio.
«El lunes pasado nosotros tuvimos una reunión de coordinación con ella, para ver los pasos a seguir sobre todo por la condición de postnatal en que está ahora. No está muy activa por razones obvias. Nosotros estimamos que, independiente de algunas acciones de presencia que puede realizar en este tiempo, tenemos que esperar que ella normalice su estado para volver en un cien por ciento, y creemos que a fines de marzo ya va a estar en condiciones», afirma Norambuena.
«Estamos haciendo actividades de acuerdo a la disponibilidad de tiempo que ella tiene, pero como estructura de campaña todavía no podemos diseñar nada hasta que vuelva por completo», agrega.
Perfil regional
En cuanto a proyectos de gobierno e ideas de país, según los parlamentarios gremialistas, no habrían grandes diferencias entre Longueira y Van Rysselberghe, sino que la distinción radicaría en las formas de hacer política.
"Pablo tiene sus condiciones y Jacqueline las suyas, y eso a la UDI la fortalece. En el caso nuestro, creemos que la Coca tiene condiciones de liderazgo muy especiales, que pueden ser muy buenas para el minuto actual en esta campaña previa dentro del partido. En todo caso, considero que estas precandidaturas se complementan la una con la otra", señala Norambuena.
"Son estilos distintos con trayectorias diferentes, entonces en ese aspecto, hay personas que pueden tener una adhesión a Pablo por toda su trayectoria, desde un punto de vista más político, en tanto que otros se pueden sentir atraídos por la figura de Jacqueline, desde un ángulo más técnico, ya que ella ha estado en el ámbito municipal, en una cosa más cercana en lo que es el contacto con la comunidad", añadió.
"Lo que nosotros hemos querido hacer es destacar un liderazgo adicional, dentro de la UDI además de Longueira, y que fuera una figura de regiones», complementa Egaña.
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