Parlamentario por Chiloé ha sido un crítico de la conducción política de Michelle Bachelet. Sin embargo, afirma que la mandataria todavía tiene la posibilidad de enmendar el rumbo y ejercer el liderazgo que la llevó al poder, siempre que sepa aprovechar la cuanta pública del 21 de mayo para alinear a la Concertación y frenar el avance de la derecha.
Desde el año pasado que el diputado Gabriel Ascencio (DC) viene criticando la falta de liderazgo de la Presidenta Michelle Bachelet, lo que le ha valido el cuestionamiento de sus pares oficialistas. No obstante, dice que la situación no le afecta y, muy por el contrario, se siente bien por haber destapado lo que era un secreto a voces al interior de la Concertación.
Pero el parlamentario por Chiloé estima que la Presidenta todavía tiene la posibilidad de recuperarse de su mal debut, para lo cual cree que las mandataria deberá aprovechar al máximo el discurso dará a la nación este 21 de mayo y en el que se prevén fuertes anuncios para las regiones y en gasto social.
"En relación a los cuestionamientos a la Presidenta, yo creo que es peor cuando alguien dice: ‘mira, porque es mujer no se le puede criticar’. Eso sí que es machista. Yo me he sentido bien, muchas de las cosas que dije, incluso el año pasado, que habían problemas de gobernabilidad de liderazgo han sido ratificadas por todo el mundo", dice Ascencio.
"En realidad, siento que en las críticas que hice en su oportunidad eran válidas, lo que estoy diciendo ahora es que el discurso del 21 de mayo va a ser la gran oportunidad para que la Presidenta se reposicione y que la Concertación actúe en forma inteligente entregándole el respaldo e impidiendo el avance de la derecha. Creo que eso se va a lograr. Las cosas se le van a colocar más difíciles a la Alianza, porque las cosas van a resultar», agrega.
Una DC ordenada
-¿Qué espera en términos de anuncios del próximo mensaje presidencial?
-Creo que por lo que hemos vivido los últimos meses, el Gobierno va a anunciar una especie de aumento en el gasto, que muchos van a denominar el comienzo de la administración de la abundancia.
Desde el punto de vista de las regiones, me gustaría que pudiéramos avanzar en una legislación que efectivamente permitiera más autonomía para lugares como los nuestros. Esto no solamente significa inyección de más recursos, sino la posibilidad que nosotros mismos administremos nuestros recursos, que nosotros mismos tomemos las decisiones de dónde invertimos, en qué áreas. Con un gobierno regional fuerte, con un presidente de un consejo regional distinto de la figura del intendente.
-Sinceramente, ¿cree que los mayores recursos ordenarán a la Concertación?
-Una mayor inyección de recursos no necesariamente significa más orden. Eso pasa por una carta de navegación clara, hacia dónde vamos, qué queremos, quién es el líder, quién resuelve los conflictos.
Por ejemplo , los democratacristianos tienen una carta de navegación, que es el voto político aprobado unánimemente por la Junta Nacional del partido. Entonces, quien se salga de ese marco va a ser un desordenado, por eso llamó la atención que el senador Pizarro saliera a criticar a Frei.
Por otra parte, la Concertación debiera tener su carta de navegación y un líder, que es la Presidenta de Chile. Ella no sólo es la jefa del Gobierno, sino además la líder de la Concertación y tiene actuar como tal. En eso no tienen nada que ver la mayor o menor cantidad de recursos que anuncie, sino que con el carácter presidencia. Eso, seguramente, es lo distinto que vamos a ver los próximos días.
-¿Advierte un giro que permita a Bachelet rearmarse?
-La gran oportunidad de este discurso del 21 de mayo no es la mayor cantidad de recursos, que va a ser muy bien recibida por todo Chile, sino el reordenamiento de la Concertación, ponerle mano firme al timón, establecer el liderazgo propio, que lo puede mostrar con mayor nitidez y naturalmente. A partir de eso, los partidos de la Concertación podrán establecer sus propios liderazgos.
¿Cree que Bachelet tiene "equipo" ministerial para acompañarla?
-El anuncio será un plan para trabajar con el actual equipo, no hay espacio para nuevos equipos ni para alentar cambios en el gabinete presidencial, eso no es posible.
