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La Moneda busca que no le salga gratis a la Concertación la acusación contra Beyer pero teme perder control de la agenda Discusión repondrá tema del lucro que complica a la administración Piñera

La Moneda busca que no le salga gratis a la Concertación la acusación contra Beyer pero teme perder control de la agenda

Marcela Jiménez
Por : Marcela Jiménez Periodista de El Mostrador
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Es inevitable que toda la atención se concentre en el libelo, lo que se verá reforzado por el propio gobierno, ya que ayer La Moneda resolvió que si “es necesario que todos los ministros salgan todos los días a cantar a coro para defender a Beyer, así se hará”.


Por más que se trató de bajar el perfil al tema, fue evidente que la acusación constitucional contra el ministro de Educación Harald Beyer, prendió ayer todas las alarmas en La Moneda. No sólo vino a empañar la estrategia gubernamental de las últimas semanas de querer mostrar un gobierno en alza, sino que abre nuevamente uno de los flancos que más dolores de cabeza ha generado a la administración de Sebastián Piñera: el lucro en la educación.

Es que hasta el mismo martes, un día antes que la oposición materializara la presentación del libelo en la Cámara de Diputados, la verdad es que en el gobierno habían mirado bastante en menos el tema. Tomaban como antecedentes que entre los impulsores de la acusación no “estaban los nombres más fuertes ni los más brillantes de la Concertación” y agregaban que no habían logrado sumar a toda la oposición.

En el contexto de esa lectura, en el gobierno además se consideraba que de llegar a presentarse la acusación, cosa que dudaban realmente, no iba a prosperar y apostaban a un resultado fallido, como todos los libelos e interpelaciones que La Moneda ha hecho frente estos tres años.

Error de cálculo, porque la oposición ayer en la mañana finalmente logró alinear a sus huestes y aplacar los temores que despertaba la idea, que pasaban desde perjudicar el retorno a Chile de la ex Presidenta Michelle Bachelet la próxima semana hasta el salir bastante arañados, por las críticas que levantará el oficialismo respecto a que en 20 años la Concertación miró al techo y no hizo nada para controlar el lucro en la educación superior.

No hay que olvidar que en este ámbito, todos tienen tejado de vidrio, debido a que en la derecha y la Concertación hay en sus filas varias figuras estrechamente ligadas al negocio de la educación superior, del cual han lucrado por años.

[cita]En la Concertación ya habían evaluado que este sería el camino a seguir por La Moneda y se llegó a la convicción que la ganancia es mayor, porque a pesar de los costos, es mucho más potente uno de los principales dardos que tienen contra Beyer, sus declaraciones contradictorias en torno a las facultades que tiene su cartera, desconocer a un poder del Estado en su labor fiscalizadora y que las actuaciones que ejerció en relación a las universidades, no fueron adecuadas o fueron tardías. Es que en diciembre fue evidente el giro público que desde entonces tuvo Beyer en su discurso sobre el lucro.[/cita]

Alarma y blindaje

El Presidente Piñera regresó ayer en la mañana de su visita al Vaticano y tras una actividad de unas horas en Antofagasta, llegó a La Moneda directo a una reunión del comité ampliado con Beyer, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, la vocera Cecilia Pérez y la ministra del Trabajo, Evelyn Matthei.

Una hora después, se evidenciaron las primeras señales de la preocupación que despertó el tema en Palacio, porque el escenario había cambiado más de lo esperado. No solamente se había presentado la acusación, sino que además se había alineado la Concertación, los independientes y el PC, por lo que no es aventurado plantear que esta vez sí estarían los votos para aprobar el libelo en la sala.

Por lo mismo, no fue gratuito que tras la reunión con Piñera, saliera Beyer flanqueado por la vocera y Matthei, quien recordó que “durante veinte años ni un solo ministro de educación ni ningún ex Presidente de la República pidió que se fiscalizara nada” y acto seguido, advirtió con dureza a la Concertación que “los vamos a sacar al pizarrón”.

Las razones de elegir a Matthei para que asumiera en ese momento la “vocería” del blindaje a Beyer, fueron varias y ninguna causa del azar: Chadwick tenía que iniciar una reunión paralela con el director general de Carabineros, Gustavo González, y el director de Investigaciones, Marcos Vásquez, para analizar los resultados de la Encuesta Nacional urbana de Seguridad Ciudadana (ENUSC).

Pero además está el antecedente del conocido estilo confrontacional de Matthei y su peso político, performance con la que no dejó lugar a dudas del mensaje que La Moneda quiso dar ayer a la Concertación: “no les saldrá gratis” —reconocían en privado en Palacio— intentar destituir a Beyer.

En la Concertación ya habían evaluado que este sería el camino a seguir por La Moneda y se llegó a la convicción que la ganancia es mayor, ya que a pesar de los costos, es mucho más potente uno de los principales dardos que tienen contra Beyer, sus declaraciones contradictorias en torno a las facultades que tiene su cartera, desconocer a un poder del Estado en su labor fiscalizadora y que las actuaciones que ejerció en relación a las Universidades, no fueron adecuadas o fueron tardías.

Es que en diciembre fue evidente el giro público que desde entonces tuvo Beyer en su discurso sobre el lucro. Y es desde entonces que se ha masticado la idea de la acusación constitucional.

Gallito de agenda

Las últimas semanas en el gobierno fueron de ganancia y así lo leían en La Moneda. Cifras menos catastróficas en las encuestas, un buen golpe de timón con el anuncio del bono marzo y el salario mínimo en 200 mil pesos que dejó en jaque a la Concertación. La guinda de la torta fue el viaje al Vaticano de Piñera a la entronización del Papa Francisco.

Pero con la acusación a Beyer nuevamente pierden el control de la agenda, se eclipsan los esfuerzos de Palacio por instalar la imagen de un gobierno que muestra logros y cosecha resultados.

Es inevitable que toda la atención se concentre en el libelo, lo que se verá reforzado, de hecho, por el propio gobierno, porque ayer La Moneda resolvió que si “es necesario que todos los ministros salgan todos los días a cantar a coro para defender a Beyer, así se hará”.

Ayer debió ser un buen día para que La Moneda se luciera con los resultados de la ENUSC, que al fin arrojaron una baja no menor: familias víctimas de delitos se redujeron de 31,1 % a 26,3 %, la cifra más baja desde que se aplica la muestra del INE.

Sin embargo, el tema pasó a segundo plano con la acusación y el blindaje a Beyer, tanto así, que a pesar que en la mañana Chadwick dio a conocer en detalle los resultados de la ENUSC, por la tarde salió nuevamente a hablar para tratar de resaltar los logros en materia de seguridad.

No será el último día que suceda eso, ya que los plazos legales que se establecen para tramitar una acusación constitucional mantienen el tema en alza por varias semanas, obligando a La Moneda a poner un ojo en el asunto.

La próxima semana es distrital, por lo que la discusión del libelo alcanzará a “empalmar” justo con la convocatoria del movimiento social a retomar las calles y movilizarse, con una marcha el 11 de abril.

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