La joven Daamaris Carrimán de 20 años, escribió en su cuenta de Facebook que decidió levantar la barrera del peaje San José en la Autopista Los Libertadores a la hora del terremoto que se sintió ayer en la zona centro norte de Chile y que debido a eso le descontarían los peajes no pagados de su sueldo.
Por medio de un comunicado de prensa, la empresa «Ruta 57» desmintió que a Daamaris Carrimán de 20 años, peajista, se le vaya a descontar de su sueldo el dinero de los peajes no pagados por los usuarios que pasaron las vallas luego de que ella decidió subirlas producto del terremoto ocurrido este miércoles.
«Frente a rumores emitidos a través de Redes Sociales y algunos medios de comunicación, RUTA 57 Santiago – Los Andes desmiente categóricamente el rumor de que se descontaría a sus peajistas el valor de peajes no cobrados con ocasión del sismo ocurrido en el país. Dicha información es completamente falsa y carece de todo fundamento», señalaron.
La joven Daamaris Carrimán de 20 años, escribió en su cuenta de Facebook que decidió levantar la barrera del peaje San José en la Autopista Los Libertadores a la hora del terremoto que se sintió ayer en la zona centro norte de Chile y que debido a eso le descontarían los peajes no pagados de su sueldo.
«Antes de ser cajera de peaje, soy persona. Tengo conciencia, valores y principios. No me arrepiento de haber levantado la barrera hoy, ni de las pérdidas que tuve. No me interesa la plata, me interesa el bienestar de las personas, sea quien sea. Díganme weona o como quieran. Prefiero ser weona antes que una mina individualista que no se arriesga a perder un peso en una situaión así. La conciencia y conmoción social empieza en casa y se desplaza por las calles. Es por eso que no todos la tenemos», indicó.
Además señaló al Dínamo que “Cada vez que pasa un auto sin pagar a nosotros nos lo cobran, lo descuentas de nuestro propio sueldo”, cuenta. “En cada replica que había levantaba la barrera. Y la jefa empezó a decirnos que no se podían levantar las barreras. Yo quería irme. Porque tengo una hija, tengo familia y estaba desesperada. Y me dijo que no. Que habían ordenado que nadie se podía ir. Y me retuvieron ahí hasta el fin del turno. Hasta las 11 de la noche”, aseguró.
