CULTURA
Es uno de los participantes de «All Contemporary Artist are Political» (ACAAP), la muestra de arte político que se exhibe en Franklin y estará abierta hasta el 19 de diciembre.
Una muestra de arte político con participación de destacados artistas internacionales se realiza actualmente en Santiago.
Se trata de «All Contemporary Artist are Political» (ACAAP), que se exhibe en Franklin y estará abierta hasta el 19 de diciembre.
Uno de los participantes es el español Eugenio Merino (Madrid, 1975), quien se hizo famoso por meter una figura del dictador Francisco Franco en un refrigerador.
Merino presenta dos obras. Una es una urna funeraria con la inscripción «In Loving Memory», que contiene en su interior las cenizas de los derechos humanos calcinados.
A su lado hay un video que certifica la quema de ese libro y su posterior inserción en la urna.
Es una pieza que coincide en el tiempo con la Convención Constitucional encargada de redactar la nueva Carta Magna, en sustitución de la Constitución de 1980 heredada de Augusto Pinochet.
La otra pieza es un «contramonumento» que hace referencia al alza del costo de la vida en Chile.
Es una instalación de unos 350 cm de ancho por unos 50 cm de alto, en que se puede leer el salario mínimo de Chile (337,000 pesos chilenos), escrito con pequeñas pegatinas de doble cara del tamaño de las monedas de 500 pesos.
La idea es que los asistentes vayan rellenando la pieza con monedas de 500 pesos para así recaudar ese salario mínimo.
Merino explica que su afición al arte político «tiene que ver con la concepción que uno tiene de la palabra arte».
«Para mí trabajar en el campo del arte tiene una relación directa con la realidad. Y es esa realidad política y social la que el arte debe cuestionar y, en alguna medida, transformar», comenta.
«Yo creo que el arte político es un espacio de resistencia simbólica y, a su vez, una maquinaria de propaganda contra el poder. Además, se rodea de medios de comunicación, talleres o conferencias que amplifican la potencia de esa oposición al sistema. No hay que olvidar que el arte es una herramienta de educación social y política, y que de ahí emana su poder subversivo».
Merino cuenta que destaca a artistas chilenos como Alfredo Jaar, Cecilia Vicuña o el grupo CADA.
En cuanto a sus próximos proyectos, Merino anticipa que está preparando una instalación comisariada por los INTERVENTORES para la Alianza Francesa de Málaga, en torno a la despolitización e instrumentalización de la muerte de Federico García Lorca.
También está trabajando con el artista francés Pierre Valls y el comisario mexicano Gustavo Ramírez, en un proyecto sobre el colonialismo y neocolonialismo en México, que producirán enteramente en los talleres de URIARTE en Puebla.
Finalmente, está colaborando con INDECLINE (EE.UU.) y Philip Kojo Metz (Alemania) en la preparación de un partido de fútbol que se jugará en Munich en 2022 con la cabeza de Otto Von Bismarck. Será «una acción simbólica que cuestionará el papel colonial alemán en África», adelanta.
