Publicidad

El juego de egos entre Alvaro Saieh y Raúl Sotomayor y su impacto en SMU

Héctor Cárcamo
Por : Héctor Cárcamo Periodista El Mostrador Mercados
Ver Más


Se conocen poco, intentan comprar barato y vender caro, son agresivos en su estilo de negocios y no echan pie atrás cuando de defender sus estrategias se trata. Alvaro Saieh, controlador de Corpgroup, y Raúl Sotomayor, presidente del fondo de inversión Southern Cross(SC), acordaron la fusión de sus supermercados —SMU y Supermercados del Sur (SDS)— en un par de semanas a mediados de 2011 y hoy se enfrentan por quien tiene la culpa de las gruesas pérdidas del holding que controla el dueño de Corpbanca. Además, pidieron un arbitraje para zanjar qué porcentaje de la propiedad debe tener Southern Cross.

Mientras tanto, deben convivir indirectamente a través de sus representantes en el directorio. Ambos bandos aseguran que quieren mirar hacia adelante, pero un gallito interno parece inevitable.

El controlador de SMU es el grupo Saieh, que tiene el 37,9%. Desde el 2008 SMU ha adquirido 58 cadenas de supermercados, incluyendo Unimarc, Alvi, Construmart y Telemercados Europa. En septiembre del año pasado, SMU se fusionó con Supermercados del Sur, cuyo controlador era Southern Cross, y dejó al fondo encabezado por Raúl Sotomayor con alrededor de un 19% de la cadena. Aunque la actual auditoría zanjará el porcentaje en forma definitiva.

La actual disputa comenzó el viernes 30 de marzo a la medianoche cuando SMU publicó sus estados de resultados del año 2011. Las pérdidas eran cuantiosas: $74 mil millones; es decir, unos US$ 142 millones.

El lunes Javier Luck, nuevo gerente general de SMU, concedió una entrevista a Diario Financiero — medio que ha liderado la cobertura del tema—, en la cual explicaba las pérdidas del holding por la adquisición de empresas deterioradas, repartiendo culpas sin matices entre la cadena mayorista Alvi, la cadena de ferreterías Construmart, la cadena peruana MaxiBodegas y SDS, de Southern Cross. En la entrevista, intencionalmente o no, hizo comentarios que dejaban entrever que el impacto principal era por la firma del fondo ligado a Sotomayor y el titular del diario ese día así lo daba a entender.

La entrevista se publicó el martes y molestó fuertemente a Sotomayor. Su reacción fue inmediata: al día siguiente envió una carta a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) —con copia a algunos diarios— donde demostraba, según su análisis, que las pérdidas provenían principalmente de la compra de Alvi y Construmart, además de otros items, pero siempre desligando a SDS de grandes responsabilidades. Ni la SVS pidió explicaciones —públicas al menos— a SMU por el titular del Diario Financiero ni SMU se apresuró a explicarle que dicho titular no reflejaba su opinión.

Sotomayor metió la daga aludiendo al efecto financiero de una operación hecha por SMU a través del fondo Fenix, que está ligado a Alvaro Saieh. Por su parte, SMU respondió duro. Además de lavarse las manos respecto del enfoque del Diario Financiero, lanzó varios cuchillazos: “Si los accionistas de Supermercados del Sur se sienten mencionados, por algo será. Es de público conocimiento la delicada situación económica por la que atravesaba SDS previo a la fusión con SMU”. Y agregó: “El mercado conoce tanto al grupo controlador de SMU como a los antiguos controladores de SDS. Quizás están extremadamente sensibles con la experiencia sufrida con otros activos que administraban”. Ese último comentario era una clara alusión al rol que tuvo Southern Cross en el escándalo La Polar y la quiebra de la central Campanario.

Observadores de la batalla dicen que Sotomayor es particularmente sensitivo a lo que dice SMU, porque es un nuevo cuestionamiento a su carrera empresarial. Por su rol en el La Polar la SVS lo sancionó con UF 2.000 ($45 millones) por el no cumplimiento de sus deberes como director de la firma hasta 2009. Sotomayor intenta apelar la sanción.

El holding que controla Saieh hasta ahora nunca ha explicitado cuánto de las pérdidas corresponde a los activos aportados por el fondo que lidera Sotomayor, pero advierten que sólo a septiembre de 2011 SDS traía pérdidas de $16.800 millones, que representan al menos un 23% de las pérdidas de SMU. Southern Cross arguye que SDS es sólo el 10% de la compañía fusionada.

El impacto de las pérdidas obligará a postergar la apertura en bolsa hasta fines de 2012, según Luck. El hecho que los socios estén enfrentados no ayuda. En ambas compañías señalan que después del impasse de los resultados, sólo resta clarificar la participación de SDS en la propiedad, que será resuelta en un arbitraje.

En opinión de algunos analistas, quizás Saieh esté pagando el precio de haber hecho un negocio sin mayores consideraciones. Conocedores de la negociación con SDS aseguran que el acuerdo que alcanzaron en septiembre de 2011 se hizo tras una serie de rápidas conversaciones, aunque Sotomayor y Saieh ya habían conversado en años anteriores sobre una posible fusión

Ambos empresarios deberán seguir lidiando en la compañía, que planea decenas de inauguraciones de supermercados en los próximos años, con lo cual esperan estrechar la brecha que los separa de Cencosud (Jumbo y Santa Isabel) y Walmart Chile (Líder, Ekono).

Publicidad

Tendencias