En una década la relación de mujer con los servicios bancarios muestra una mejoría importante. Si en 2002 de cada 100 deudores 36 eran del sexo femenino, en 2012 fueron 44. Así también a nivel de montos otorgados: de 100 unidades de crédito monetario recibían hace 10 años 26 y en el ejercicio pasado 34.
Estas son algunas de las conclusiones del último estudio de género, fechado a septiembre de 2012, de la Superintendencia de Bancos (SBIF) que desde 2002 comenzó a desagregar información tomando en cuenta el factor femenino.
La deuda de la mujer está fuertemente ligada al sueño de la casa propia, pues más de la mitad —58 de cada 100 unidades monetarias que usa la SBIF en la medición— está asociada a financiamiento hipotecario. En el caso de los hombres, la relación es 53 de 100.
La diferencia en la deuda promedio por sexo es notable. La femenina está en un rango que oscila entre el 64 % al 71 % de la deuda promedio masculina por un comportamiento más conservador y las brechas de ingreso, según el informe de la SBIF.
Aunque la presencia de la mujer en el mundo laboral ha subido en la última década del 30 al 41 % la diferencia de salarios se ha mantenido. Ellas reciben un 80 % de lo que obtienen sus pares del sexo masculino revelan los datos de la nueva encuesta suplementaria de ingresos (INE 2012) que cita el estudio de la superintendencia del ramo.
Las mediciones internacionales dan cuenta de un desempeño negativo de Chile en materia de equidad de género. El informe del Foro Económico Mundial de 2012 revela que Chile ocupa la posición 87 en el Ranking Global de Brechas de Género entre 135 países con ingresos per cápita similares. Se promedian cuatro áreas en las que Chile muestra ubicaciones dispares: en salud ocupa el primer lugar; en educación el 32; en participación política el 64 y en participación económica el 110.
Cuentas corrientes: el 37 % son del sexo femenino
Del total de cuentas corrientes abiertas en el país (16,3 millones), sólo un 37 % pertenece al género femenino. Cifra que aumenta a 48 % en cuentas a la vista. Pero en ambos productos ellas han aumentado más su participación que los hombres en la última década: un 9 % en el primer producto (versus 6% de los hombres), y un 22 % versus 19 % en el segundo.
A la hora de ahorrar las mujeres llevan la delantera: de cada 100 cuentas de ahorro contratadas por personas naturales, 58 corresponden a mujeres, aunque los saldos son inferiores en un 6 %.
Y son como siempre se ha dicho mejores pagadoras. La tasa de protestos femenina es de 10 por cada mil cheques; la de los hombres de 12. Tendencia que se repite con la morosidad.
