Publicidad

Plan B argentino es visto como prematuro y gatilla temores de un nuevo «default»


El intento argentino de convencer a los bonistas de que renunciaran a las garantías de las leyes estadounidenses hace peligrar el pago de intereses sobre los US$ 14.000 millones de deuda previstos para el mes próximo y crece así el fantasma de que haya un segundo default en doce años.

El costo inicial para proteger la deuda soberana contra impago durante un quinquenio sirviéndose de permutas de riesgo crediticio saltó en unos 3,85 puntos porcentuales, que es el valor más elevado de todo el mundo y tuvo lugar después de que la presidente Cristina Fernández de Kirchner dijo que Argentina ofrecería un canje de bonos reestructurados por títulos de deuda regidos por la legislación local a fin de evitar así que se produzca toda interrupción en el pago tras la derrota sufrida en los tribunales estadounidenses ante los bonistas en rebeldía, que son acreedores del default 2001.

Para Mark Weidemaier, profesor de derecho en la universidad de Carolina del Norte, el intento de Fernández de eludir la decisión que descarta que pueda hacer pagos sobre los títulos a menos que le pague a los bonistas en rebeldía bien puede impulsar a esos inversores que lidera NML Capital Ltd., de Elliot Management Corp., a pedirle al tribunal de apelaciones que dicte la ejecución de la sentencia. Para el profesor, el tribunal, que demoró la aplicación de la decisión hasta tanto la Corte Suprema de Estados Unidos resuelva si entenderá en el caso, podría verse obligado a levantar la suspensión de la ejecución.

“Esto podría ponerse muy entretenido muy rápidamente”, dijo Weidemaier durante una conversación telefónica establecida desde Chapel Hill, Carolina del Norte. “El tribunal de apelaciones dejó bien claro que va a poner un límite ahí. En realidad, Argentina no debe temer la declaración de rebeldía. Debe temer que se levante el efecto suspensivo que le permite, por ahora, seguir pagándoles, como hasta ahora, a los bonistas que aceptaron el canje”.

Pago de intereses

La rentabilidad de los títulos de deuda en dólares de la nación se alzó súbita y repentinamente al promedio del 13,92 por ciento, que es el más elevado de los mercados emergentes, según los datos recabados por JPMorgan Chase Co.

El 26 de agosto, Fernández dijo que les iba a ofrecer un tercer canje de deuda con las mismas condiciones contractuales que los de 2005 y 2010 a los tenedores de bonos reestructurados que quieran que los títulos sean pagaderos en Argentina.

La decisión apuesta a esquivar el fallo que les impide al banco fiduciario Bank of New York Mellon Corp. y otras entidades hacer los pagos a los bonistas.

Norma Madeo, vocera del ministerio de Economía argentino, no respondió a la carta electrónica que se le dirigió para que formulase comentarios referidos al riesgo de que se diera marcha atrás al efecto suspensivo dispuesto en la sentencia. Peter Truell, vocero de NML, que es una unidad del fondo especulativo Elliot Management, del multimillonario Paul Singer, declinó formular declaraciones respecto de si la empresa le pedirá al tribunal que levante la suspensión y disponga la ejecución de la sentencia.

Antes del anuncio, Henry Weisburg, abogado de Sherman Sterling LLP, calculó que la ejecución de la sentencia podría suspenderse hasta el primer trimestre de 2014.

Publicidad

Tendencias