José Antonio Guzmán acaba de anunciar su retiro del mundo empresarial. El ingeniero comercial de 71 años decidió dejar la presidencia de la AFP Habitat, controlada por la Cámara Chilena de la Construcción (Cchc), luego de 8 años en el cargo y 9 como director, dejando así un profundo vacío en el sector previsional, donde fue clave en el último tiempo para que la industria comenzara a adecuarse al nuevo contexto político y económico del país.
Guzmán deja tras de sí una larga y ajetreada trayectoria en el sector privado que alcanzó altura en 1989, cuando se transformó en presidente de la Cchc y en particular cuando asume la presidencia de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) en diciembre de 1990, cumpliendo un rol clave en la transición desde la dictadura a la democracia con la llegada, en marzo de ese año, de Patricio Aylwin a la Presidencia del país.
A fines de 1997, asumió la presidencia de Enersis en medio del escándalo desatado por la venta de la empresa a Endesa España (Caso Chispas). Luego asumiría en Endesa Chile y terminaría alejándose del directorio, tras duras disputas con los ibéricos. Desde 2006 preside Habitat, donde ha jugado un rol clave en los casos más bullados.
Su salida la explicó él mismo en una carta al vicepresidente de Habitat, Luis Nario, donde explica que su renuncia se entiende dentro de los estrictos plazos que la Cámara da a quienes participan en los directorios de las empresas del holding ILC, los que ya había superado. En este sentido, la Cámara ha hecho una excepción para dilatar plazos sólo con Guzmán y Juan Eduardo Errázuriz en la Caja de Compensación Los Andes.
Pero también alude a motivos personales que, aunque no los detalla, tienen que ver con su salud, que ya no es la misma para las duras exigencias de su rol al frente de Habitat.
El anuncio no es una sorpresa para la Cámara. Fuentes cercanas al gremio aseguran que Guzmán venía planteándolo desde hace más de un año, pero en el gremio no la habían aceptado. Y su sucesor ya está definido. Aunque no se ha revelado el nombre, se sabe que el próximo timonel no pertenece al directorio actual, se conocerá en los próximos días y debe estar a la altura del carisma de Guzmán.
En particular, debió seguir hasta ahora porque estaba en medio de la disputa que dio con dureza ante el holding eléctrico Enersis en 2012, a propósito del millonario aumento de capital aprobado ese año y que debió ser corregido en su monto (a la baja) y en su procedimiento.
Guzmán instaló en ese momento la realidad del nuevo Chile, en que un conglomerado como Endesa España no podía pasarle por encima a los accionistas minoritarios. Habitat fue hábil para instalarse ante la opinión pública como un genuino defensor de los intereses de los afiliados, aunque luego se opacó su rol al aceptar sin mayores cuestionamientos la operación final, con la sola baja en el monto de la operación.
También ha tenido un rol protagónico en el caso Cascadas. Habitat ha sida una de las AFP más agresivas en cuestionar las operaciones hechas por Julio Ponce y por las cuales éste enfrenta cargos de la SVS.
La otra causa para la postergación de su salida, agregan las fuentes, fue el rol rupturista que ha liderado Habitat en el último año. La AFP fue la única administradora que bajó sus comisiones desde agosto de 2010, cuando Modelo –la AFP de Andrés Navarro– ganó la licitación de nuevos afiliados con una comisión de 1,14%. Habitat, tras perder en el proceso, rebajó de 1,36% a 1,27%, rompiendo con la ignominia de la competencia que en este periodo nunca ha movido sus precios.
Pero además, inició en el último año una agenda comunicacional de apertura a discutir cambios al sistema de AFP, entendiendo que era eso o el fin del sistema, dados los cuestionamientos que tienen las gestoras privadas tras la crisis subprime de 2008, donde se perdieron casi US$ 40.000 millones en un año.
Esta posición, rompió con el estricto rechazo de la industria a cambios muy violentos, liderados por el actual presidente de la Asociación de AFP, Guillermo Arthur, quien –al igual que Guzmán– tiene vínculos con la derecha e incluso con el gobierno de Pinochet (Guzmán fue candidato al Congreso en 1997 con el apoyo de la UDI y Arthur fue ministro del Trabajo en 1988-1989). Arthur, lo mismo que Guzmán, dejará su cargo en las próximas semanas, tras casi dos décadas al frente.
Cercanos a Guzmán aseguran que la lucha que dio en el gremio fue dura, que Habitat no tiene pensado salir de la asociación y que prefiere darla desde adentro. La relevancia de Habitat, al mismo tiempo, ha permitido que Guzmán tenga manga ancha para deslizar críticas a la industria por su inmovilismo regulatorio, como lo hizo ver en enero pasado en una entrevista a El Mercurio, donde afirma que la industria debe abrirse a negociar cambios, como compensar a los afiliados cuando haya pérdidas de fondos por menor rentabilidad.
Guzmán no deja cabos sueltos. En las próximas tres semanas liderará la presentación de las propuestas de Habitat para adecuar el sistema de AFP a los nuevos tiempos y a fines de abril liderará la última junta de accionistas de la administradora. En la Cámara ya le preparan una pomposa despedida.
Otro caso donde destacó Habitat bajo su liderazgo es Cascadas, donde se unieron a Moneda Asset Management para enfrentarse a Julio Ponce Lerou. De hecho, una de las últimas apariciones públicas de Guzmán ocurrió a propósito de la reunión que le pidió el propio controlador de SQM.
