“Nos vamos a seguir movilizando hasta que nuestros derechos básicos sean garantizados por el Estado, hasta que la vida sea digna para cada uno de los habitantes de este país, y especialmente hasta que la herencia de la dictadura se haya ido de cada rincón de Chile, y también de esta universidad”, dijo el presidente de la FECH durante un acto para recordar a los miembros de la casa de estudios que cayeron durante el régimen militar.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), Andrés Fielbaum, aseguró este miércoles que la casa de estudios superiores también fue una de las víctimas de la dictadura que se instaló en el país después del 11 de septiembre de 1973.
Al intervenir en el acto organizado por la casa de Bello y que estuvo encabezado por su rector, Víctor Pérez, precisamente para recordar a los miembros del plantel que fueron víctimas del régimen militar, el dirigente manifestó que una de las motivaciones del movimiento estudiantil es precisamente la necesidad de erradicar la “herencia” que dejó el gobierno de facto en la educación pública del país.
“Nos vamos a seguir movilizando hasta que nuestros derechos básicos sean garantizados por el Estado, hasta que la vida sea digna para cada uno de los habitantes de este país, y especialmente hasta que la herencia de la dictadura se haya ido de cada rincón de Chile, y también de esta universidad”, dijo Fielbaum.
Y recordó que “las universidades públicas, es decir las universidades estatales, fueron también grandes víctimas de la dictadura: el autofinanciamiento y sus consecuencias en la pérdida de valor público, las estructuras verticales del gobierno, la desaparición de la educación técnica estatal, entre muchos otros ejemplos”.
El dirigente aprovechó la oportunidad para hacer un reconocimiento a “Patricio Manzano, que cayó en los trabajos voluntarios de la FECh y se convirtió así en el segundo mártir de la federación”.
