PAÍS
Foto: Nicolás Le-Blanc/AgenciaUNO
Alrededor de 140 mil extranjeros están en Chile sin documentos ni residencia legal, lo que dificulta su identificación y ubicación. Perú ha intensificado su control migratorio y no admite a ciudadanos sin documentos o sin residencia legal en Chile, lo que ha provocado la acumulación de migrantes en la carretera que une ambos países. El gobierno chileno ha destinado recursos adicionales para identificar a los migrantes no regularizados, y se implementará un sistema biométrico para identificarlos.
El problema migratorio en Chile ha generado una nueva situación complicada, ya que cientos de migrantes que no pudieron regularizar su situación están intentando cruzar hacia Perú desde Chacalluta. Actualmente, se estima que hay 140 mil extranjeros en el país cuya identidad y ubicación son desconocidas. Desde la semana pasada, la carretera se ha llenado de migrantes que no pueden salir de Chile debido a la intensificación del control migratorio por parte de Perú, que no admite a ciudadanos sin documentos o sin residencia legal en Chile.
Uno de los migrantes que intentaba cruzar la frontera dijo a Meganoticias: “Quiero cruzar para poder irme a mi país. No puedo quedarme en el limbo, porque no tengo comida. O nos dejan pasar o nos dejan regresar. No nos queremos quedar”. Por su parte, Julio Cadenilla, cónsul general de Perú en Arica, declaró que el problema está siendo manejado por el Ministerio de Tacna y la Acnur en cuestiones humanitarias.
El gobierno chileno ha destinado recursos adicionales para identificar a los 140 mil migrantes que ingresaron al país de forma clandestina después del proceso de regularización de 2018. Se ha anunciado la implementación de un sistema biométrico en mayo-junio para identificarlos. Luis Thayer, director del Servicio Nacional de Migraciones, señaló que el gobierno no sabe quiénes son y dónde están.
La reforma que modifica la regulación migratoria en la Constitución fue aprobada el martes y según la ministra Carolina Tohá, “le dará a Carabineros la posibilidad de colaborar en el control de migraciones”.
La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Perú advirtieron este jueves sobre el peligro y la “grave situación” de abandono que corre la población migrante en la región de Tacna, fronteriza con Chile.
“Alertamos de la grave situación en Tacna, en el sur del país, donde personas refugiadas y migrantes se encuentran varadas en muchos casos sin alimentos, agua, alojamiento o asistencia sanitaria, enfrentándose a mayores riesgos de protección, desde febrero de este año”, denunciaron en un comunicado conjunto consignado por agencia EFE.
Las organizaciones internacionales también señalaron que se han registrado casos de abusos sexuales, lo que afirman que aumenta el riesgo de las niñas, mujeres y comunidad LGTBI+.
Ante esta situación de personas varadas, ACNUR y OIM reforzaron la asistencia a los más necesitados en Tacna, a quienes distribuyeron alimentos, agua y equipos de emergencia.
“Acnur y OIM están brindando orientaciones, distribuyendo kits de emergencia y alimentos, hidratación, monitoreando la frontera para identificar grupos familiares en vulnerabilidad, coordinando con socios en el terreno para dar alojamiento a las personas más vulnerables y asistencia sanitaria”, aseguraron las organizaciones.
Las instituciones que forman parte de las Naciones Unidas agradecieron la labor de la comunidad peruana, la ayuda de las diócesis y el trabajo de otros actores locales que prestaron sus servicios a los migrantes en Tacna.
A fines de febrero, Chile inició un despliegue militar en los puntos críticos de la frontera con Perú y Bolivia durante 90 días con miras a aumentar el control del ingreso irregular de personas migrantes que afecta la zona.
A la fecha, según cifras oficiales chilenas, casi 1,5 millones de extranjeros viven en Chile -mayoritariamente venezolanos y peruanos, dato que no incorpora a los ciudadanos que no están regularizados en el país.
