Señor Director:
Durante la discusión presupuestaria para el 2019, la Comisión de Familia de la Cámara de Diputados rechazó la iniciativa del Ejecutivo para aumentar en un 25% las subvenciones a los organismos colaboradores (OCAS) del SENAME, fundándose en la supuesta vulneración a los derechos de niños y niñas que existiría dentro de dichos centros.
Creemos que la decisión está completamente alejada de la situación real del cuidado de menores en Organismos Colaboradores, como hemos evidenciado en nuestro trabajo con estos. Si bien es cierto que debemos adentrarnos en la discusión de fondo respecto al sistema, sus falencias, fiscalización y el resguardo de los derechos de la infancia, esto no puede ser a costa de negar el financiamiento anunciado a los centros donde se atienden la mayor parte de los menores del SENAME.
Antes que cerrar puertas y recursos, debemos recordar que la colaboración de los privados en la provisión de bienes públicos no solo es necesaria: nos demuestra que los problemas comunes tienen también solución en una sociedad civil solidaria, involucrada y corresponsable de los problemas comunes. Negar este aporte significa, en este caso, olvidarse de los niños que atienden los organismos colaboradores; poner un capricho antes que el interés primordial de los NNA, e intentar usar el sufrimiento de los mismos como moneda de cambio en un forcejeo político de oposición.
Porque el verdadero afectado no será el gobierno, sino esos niños «privados» que, en vez de jugar, estarán pendientes de que alguien vuelva a ponerlos primero en la fila.
Diego de la Barra
María Gracia Pavez
Cristián Orellena
Maida Merino
Rafael Goni
Isidora Lira
Hugo Jordán
Consejeros Territoriales Electos
Solidaridad UC
