Fuentes cercanas a la administración Bush señalan que, de alguna forma, la guerra ya se inició. "We are in", (estamos adentro). " Solo falta la toma definitiva de Bagdad, el derrocamiento de Sadam y el control de los centros neurálgicos de la diezmada defensa del ejército iraquí", sostienen.
Mientras surgen las primeras versiones de conversaciones grabadas en el Consejo de Seguridad de la ONU, comandos británicos y estadounidenses se infiltran en Irak para, según algunos, provocar "el incidente" que desencadene el ataque sobre Bagdad, pese a que el gobierno iraquí comenzó a destruir los misiles Al Samoud-II, como se lo exige la ONU.
En la panorámica de cualquier civil que se informa, se observa que ninguno de los actores clave sobre quienes descansa la responsabilidad de esta guerra, está haciendo su trabajo de la forma que se espera. Hay fisuras en todos los frentes en una plan de guerra que está decidido de ante mano y que, de alguna forma, está en marcha. En este sainete de equívocos, el más eficiente y coherente sigue siendo Sadam Husein y su equipo.
Nunca antes , ni en los períodos más críticos de la confrontación entre la ex URSS y EEUU, ni en las masacres de la guerras de la península coreana y Vietnam, se habían observado el nivel de inconsistencia y desorden en la gestión de estado y diplomática, como en este asunto de Irak.
Como ya se ha establecido claramente, el tópico central es qué sucederá con el Irak y la región inmediata, después de la partida de Sadam Husein. Es una comedia diplomática internacional que el mundo presencia mientras se espera una segunda resolución. Sin embargo, para todos los efectos prácticos las fuerzas de los EEUU ya entraron al Irak . No con todo su peso, a la espera de que dicha resolución les permita entrar oficialmente en operaciones de guerra.
Pero en las fronteras del norte y sur de Irak, las arenas registran las huellas de la invasión. Estas violaciones al territorio iraquí no suceden a espaldas del Consejo de seguridad, pero no las aborda por no ser materia de su agenda. En este escenario vale la pena preguntarse: ¿Qué es lo que, finalmente, está abordando el Consejo, una guerra que comenzó hace semanas o la forma de derrocar a Husein?
"Las visitas de comandos camuflados se ha intensificado. Igualmente, son una rutina las incursiones aéreas de aviones estadounidenses", señala una fuente a El Mostrador.cl, que agrega: "Los medios al interior de los EEUU muestran una imagen aséptica y deslavada de la crisis, pretendiendo que aún no hay guerra y que Washington está respetando los plazos de la ONU. Pero en el fondo, todos saben que la guerra es una realidad y que EEUU solo espera la decisión de la ONU para dar el golpe definitivo a Husein".
Los comentarios que circulan, tanto en la sede de la ONU y en la Casa Blanca, entregan una luz de este doble proceder. Bush al aparentar que está a la espera de la resolución de la ONU, solo le está haciendo un favor a su aliado principal -Blair- para que no sufra una derrota política.
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