Entre las medidas para aminorar posibles dificultades, ministro Marcelo Tokman dijo que ya se encuentran en desarrollo los proyectos de GNL en las ciudades de Quintero y Mejillones.
El Gobierno admitió que el próximo año podría ser «complejo» en materia energética, aunque sostuvo que el país está mejor preparado para enfrentar un escenario de dificultades.
«Si las condiciones climáticas y los envíos de gas desde Argentina no cambian, vamos a estar nuevamente enfrentando un año complejo», aseguró el ministro de Energía, Marcelo Tokman,.
Entre las medidas para aminorar posibles dificultades, dijo que ya se encuentran en desarrollo los proyectos de gas natural licuado (GNL) en las ciudades de Quintero y Mejillones, que permitirán importar gas desde países lejanos.
En los últimos años se ha agudizado el problema de abastecimiento energético en Chile, debido a los mayores precios del petróleo y a las restricciones del gas que Chile importa desde Argentina.
Chile debe importar actualmente el 98 por ciento del petróleo que consume y el 75 por ciento del gas, elemento éste que es importado desde Argentina, pero las necesidades internas del país vecino han provocado desde el 2004 recortes en el suministro, que este año se agudizaron y se hicieron más frecuentes.
Además, durante 2007 el país sufrió uno de los inviernos más fríos y secos de los últimos años, fallaron generadoras y también hubo un terremoto en la zona norte del país.
Al respecto, Tokman comentó que «aunque parece una broma, pasó todo lo que podía pasar mal».
Destacó, sin embargo, que las medidas adoptadas en la flexibilidad en el uso de agua embalsada, incentivos a la reducción de consumo y la entrada en operación de una nueva planta de gas propano, entre otras, ayudaron a mitigar los problemas y concluir el año sin alteraciones en el suministro de gas y eléctrico del país.
Sobre la relación con Argentina y la dependencia de Chile del gas natural de ese país, Tokman adelantó que se iniciaron las reuniones para asegurar el suministro, y afirmó que su país necesita diversificar la matriz energética y «la gama de proveedores de energía».
Respecto a los precios de la electricidad, que en Santiago aumentaron un 46 por ciento este año, Tokman señaló que los valores en 2008 dependerán fundamentalmente de los envíos de gas desde Argentina, las condiciones hidrológicas de la próxima temporada y los precios internacionales de las materias primas para generación.
Añadió que «lo que nadie duda es que los precios (de la energía) van a ser bastante más bajos el año 2010, porque ahí sí habrá un aumento en términos de la capacidad y, además, van a estar operando las plantas de GNL.
EFE
