A través de clases teóricas y prácticas estudiantes de cuarto básico participan en la producción de vino, permitiéndoles conocer e identificar conocimientos que han sido transmitidos de generación en generación y son valorados en todo el mundo como un patrimonio histórico.
En el marco del Programa de Valorización Territorial que impulsa Viña Santa Rita con la comunidad en Alto Jahuel desde el año 2012, nace el “Proyecto Vendimia”.
El programa está enfocado en estudiantes de cuarto básico del Liceo Alto Jahuel y busca generar sentido de orgullo, pertenencia y apego al territorio.
“Este proyecto es un apoyo al desarrollo local y la cultura vitivinícola de nuestro país. Somos el cuarto exportador de vinos del mundo, pero las actividades más propias de la agricultura han tendido a perder sus tradiciones en los territorios, las nuevas generaciones han ido perdiendo el amor por la actividad local y el arraigo a su territorio”, destaca Elena Carretero, gerente de Asuntos Corporativos y Sustentabilidad.
“Con el proyecto vendimia, realizado por once años junto al liceo vecino a nuestra viña, buscamos mantener y potenciar la actividad vitivinícola y otras actividades propias de la zona que pueden ser potenciadas a través del snoturismo. Se busca el rescate de la cultura y el desarrollo local en el largo plazo”, explica.
“Estamos tratando que los más pequeños, al igual que muchos de sus familiares, logren reencantarse, valorar su territorio y tengan posibilidades de desarrollo en él”, complementa.
En una primera etapa, los niños realizan clases teóricas, talleres y actividades prácticas en la sala de clases con profesores especializados. Luego, en una segunda etapa, los alumnos visitan Santa Rita para conocer en persona el proceso de elaboración del vino y las bodegas históricas del lugar.
Por último, reviven la tradición de la vendimia podando uva con sus propias manos y luego la pisan, obteniendo el mosto como era realizado en tiempos pasados.
“Las actividades permiten a los alumnos conocer e identificarse con el territorio junto con desarrollar sentido de pertenencia al lugar donde viven y que hoy en día es visitado por miles de turistas del vino de todo el mundo”, agrega Carretero.
El valle del Maipo es un territorio de clase mundial y referente en producción de vinos, actividad económica cuya historia y tradiciones son parte del patrimonio cultural de nuestro país, por eso es importante que las y los niños conozcan desde pequeños la relevancia que tiene esta actividad para la zona y Chile.