Introducida en nuestro país durante el siglo XIX, es una de las cepas más populares del momento por ser un vino versátil y de fácil maridaje. Además, siempre es una buena alternativa para regalar a las madres, sobre todo con innovadoras propuestas recién lanzadas que incluyen y una versión reducida en calorías.
El primer viernes de cada mes de mayo se celebra el día internacional de la variedad Sauvignon Blanc, la octava uva de vino más plantada del mundo, que se cultiva en muchos países y cada lugar le da a la uva un sabor distinto y carácter propio de cada valle.
Actualmente las plantaciones mundiales de Sauvignon Blanc se han duplicado, pasando de 65.000 hectáreas en 2000 a casi 130.000 en 2020. En 1990 había sólo 46.000 hectáreas, por lo tanto, en tres décadas casi se ha triplicado la plantación global.
En nuestro país es la segunda más plantada y cuenta con el 13.6% de la producción total de vinos.
Esta cepa se originó en el Valle del Loira, donde su sinónimo “fiers” se mencionó ya en el siglo XVI. El nombre “sauvignon” se deriva de dos palabras francesas: sauvage (“salvaje”) y vigne (“vid”). Esto debido a que es una planta de crecimiento vigoroso y la forma de sus hojas es similar a las de las vides
Fue introducida a Chile durante el siglo XIX. Claudio Gay y luego Silvestre Ochagavía, en 1854, importaron cepas francesas entre las cuales se encontraba la Sauvignon Blanc, una cepa muy versátil que combina con una gran variedad de platos como pollo o pavo.
También es excelente para mariscos y pescados o para una tabla de quesos blandos, al igual que para ciertas verduras.
Este es un vino que se sirve helado pero sin exagerar, ya que los aromas y sabores se neutralizan. Además se debe servir en copas más pequeñas que las de vino tinto, principalmente para mantener la temperatura baja del vino, ya que en una copa más grande el vino tiene mayor contacto con el aire lo que hace que el calor o el frío se desvanezcan más rápido.
Este día es una oportunidad para que los amantes del vino prueben diferentes variedades y estilos de Sauvignon Blanc, aprendan sobre su historia y características, y disfruten de una copa de este vino blanco fresco y afrutado.
También es un buen regalo para el Día de la Madre, por ser un vino liviano y versátil.
Carmen Gran Reserva: De color amarillo verdoso pálido, este vino tiene elegancia y frescura. La nariz revela notas de grosella, fruta de la pasión y lima. Tiene una gran acidez y una sensación en boca compleja, delicada y de larga persistencia.
Medalla Real Gran Reserva: Este vino es de color amarillo verdoso brillante. La nariz tiene aromas puros e intensos de pomelo, lima y notas cítricas combinadas con la clásica grosella y el distintivo final mineral característico del Valle de Leyda. Elegante y delicado, este es un vino tremendamente equilibrado con una acidez vibrante que se extiende por el paladar a medida que desarrolla sus componentes afrutados y ofrece su largo final frutal.
120 Reserva Especial: Este Sauvignon Blanc tiene una gran intensidad aromática que combina notas frutales y cítricas acompañadas con suaves notas vegetales que recuerdan al ají́ verde. En boca muestra una acidez balanceada y frescor con un agradable final frutal. Su persistencia media-larga lo hacen un vino liviano y fácil de disfrutar.
Tras el éxito desde su lanzamiento en 2021, Misión presenta un nuevo, sofisticado y fresco vino. Se trata de Misión Sauvignon Blanc Medium Sweet, un vino blanco, que llega a sorprender con su innovadora propuesta enológica, y envolvente aroma y sabor, para todos aquellos consumidores que buscan atributos únicos y un equilibrio perfecto entre el dulzor y la intensidad.
Este Sauvignon Blanc destaca por su color amarillo brillante con reflejos verdosos. En nariz es intenso, fresco, limpio, frutal y floral, destacando aromas críticos como el pomelo rosado y la cáscara de mandarina, junto con agradables notas herbales, como la menta y el hinojo, además de un delicado aroma floral a jazmín. En boca es fresco y jugoso, con buen volumen y refrescante gracias a su relación acidez-intensidad.
Su versatilidad y gran calidad permiten que se pueda maridar en distintas ocasiones de consumo: durante el aperitivo con frutos secos, con una ensalada de frutas de la temporada, e incluso con un foie gras o quesos maduros y grasos como los camemberts o brie. También, es ideal para maridar con postres como pie de limón, tarta de fruta fresca y torta de chocolate con naranja, o simplemente para disfrutar solo, en estas calurosas tardes de verano.
Recientemente Toro de Piedra lanzó su primer Sauvignon Blanc, categoría Gran Reserva y Edición Costera, el décimo primer vino de su premiado portafolio.
Ideal para compartir en como aperitivo o en compañía de un fresco ceviche y mariscos crudos, Toro de Piedra, Gran Reserva Sauvignon Blanc Edición Costera proviene de Tapihue, Valle de Casablanca. De color amarillo palido con reflejos verdosos, en nariz es intenso a maracuya, pomelo, lima y hierbas frescas y su boca presenta con una acidez marcada en la entrada, perfil vertical con sensación y salina en el final, ideal para maridajes mediterráneos.
Los vinos Toro de Piedra destacan por ser vinos de una consistencia infalible, un carácter singular, y una calidad de excelencia, que invitan a vivir una experiencia única.
“Un Sauvignon blanc de la zona de Tapihue. Con su clima temperado frío, la influencia marina y sus suelos graníticos, las parras de Sauvignon blanc entregan este vino de gran tipicidad. Intenso, fresco y texturado en boca”, dice el enólogo Benoit Fitte.
Belight es el nombre de la nueva y fresca propuesta que Casillero del Diablo. Se trata de un Sauvignon Blanc que tiene como característica principal el poseer menos calorías que un vino tradicional.
“Buscamos principalmente uvas de zonas donde la variedad Sauvignon blanc madura más temprano, lo que nos permite conseguir uvas con menor nivel de azúcar y, por ende, un menor contenido alcohólico gracias a un proceso natural, no requiriendo desalcoholizar”, afirma Max Weinlaub, enólogo de Casillero del Diablo.
El enólogo además agrega que “a pesar de cosechar anticipadamente, se mantienen en todo momento las características clásicas de un Sauvignon Blanc en cuanto a color, aroma y sabor”.
Este vino destaca por un color amarillo pálido, su fresca nariz cítrica, con toques herbáceos y de durazno blanco. En boca mantiene su frescura, acompañado de agradables notas cítricas.
Esta alternativa posee tan sólo 65 calorías por copa (porción de 125 ml). Como referencia, una copa de esta variedad normalmente contiene 89 calorías, por lo que esta nueva propuesta posee un 27% menos de calorías que una copa de Sauvignon Blanc tradicional.
