Hijo de diplomáticos, el actor nacido en Caracas pero chileno de cepa iba a ser futbolista y hasta hizo un año de Psicología, pero estudió actuación en Londres. Comenzó una carrera ascendente que lo llevó a una serie de alta sintonía mundial y ahora en una película clase A, llena de actores latinos que se estrena el 29 de enero.
Algunos de los espectadores no lo conocen de nombre, y con la barba tupida, el pelo quemado y la ropa andrajosa, Santiago Cabrera no se parece a Isaac Méndez el pintor que predice el futuro, hasta ahora su rol más popular gracias al éxito de la serie «Héroes» exhibida en el canal Universal.
Pero hay algo en el acento del comandante Camilo Cienfuegos, el amigote de Benicio del Toro en la primera parte de «Che», que sonará demasiado familiar para el público local cuando la película de Steven Soderbergh se estrene el 29 de enero. En especial en una escena mientras pela una fruta y dice «oye Che, vamos a jugar a la pelota». Trabajó durante meses en La Habana y el interior de Cuba para que se le pegara la música del lenguaje y el acento. «Tuvimos también un ‘bootcamp’ con un grupo de actores donde hicimos vida de guerrilleros durante unos días. Conocer gente que conoció a Camilo, al Che. Gente que participó de la revolución en esa época. Vi muchas películas cubanas también, para tratar de entender la cultura y la historia de ese país lo mas posible. Lo mas importante para mi fue poder comprender de alguna manera el contexto social que estaban viviendo», explica Cabrera desde Los Angeles a El Mostrador.cl.
El futbolista nómade
Pero la película y el estricto trabajo de la producción tampoco lograron cambiar el tono que Cabrera tiene muy pegado. En otra secuencia está contando una anécdota, haciendo los gestos de un hombre que cae con una granada y da la impresión que en cualquier momento puede decir «cachai».
Cabrera tiene 30 años, es hijo de Pablo Cabrera Gaete, diplomático de extensa carrera en el servicio exterior y que actualmente encabeza la misión chilena en la Santa Sede. El actor nació en Caracas, vivió en Canadá, Rumania, Inglaterra y España, hasta los 15 años cuando volvió a Chile. «Me siento chileno. Ahora, ¿qué es ser chileno? esa es una pregunta para otra entrevista, pero si, me siento y me considero chileno» dice.
Tal vez la secuencia donde su personaje de Cienfuegos invita al Che a jugar fútbol en chileno, le sale con tanta naturalidad porque la pelota fue el rubro donde Cabrera quiso probar suerte desde que era niño. En todas las ciudades donde vivió se integró a los equipos de futbol del colegio y era una especie de mito entre los compañeros de sus primos en el colegio San Benito, donde hizo un taller de teatro para ex alumnos. Ahí se dio cuenta que podía ser actor de verdad.
En 1999 siguió a su padre que estaba destinado en Londres. Dejó una corta experiencia como alumno de sicología en la Universidad Católica donde ingresó con una beca deportiva. En Londres hizo un taller de teatro que duró 10 meses y luego estuvo en el London Drama Centre desde 2000 hasta 2003.
Independiente en las grandes ligas
La versión de Steven Soderbergh sobre el Che es según dice su trabajo más importante en el cine. A pesar que tiene en su historial de Imdb (Internet Movie Data Base) una decena de apariciones en películas de distinto calibre desde Goal 2 donde le ayudó la formación como futbolista y conoció a David Beckham hasta «Empire» y «Héroes», las series que lo hicieron conocido en el mainstream.
«Yo diría que tanto Empire como Héroes de alguna manera fueron mas súper producciones que Che. Si bien Che es un proyecto grande, sigue siendo una película independiente. El hecho que tenga a Soderbergh como director y Benicio (del Toro) como protagonista a lo mejor hace pensar en una súper producción de Hollywood, pero no fue así. Es un film en español, con actores latinos y filmada muy al estilo guerrilla, lejos de lo que son las grandes filmaciones de los estudios de Hollywood. Por ejemplo, no teníamos trailer cerca del rodaje, ni asientos con nuestros nombres para descansar entre tomas, etc… Nada de eso. Yo creo que esta misma película si se hubiera hecho al estilo de Hollywood, de partida hubiera sido en inglés y habría costado el doble», explica.
Al set de Che, llegó porque junto a su agente venían siguiendo hace años la pista del proyecto y cuando empezaron los castings envió un video haciendo un texto como el prócer Camilo Cienfuegos, el director lo vio y le dio el papel. Filmaron durante 2007 en México y Puerto Rico. El año pasado estuvo en el lanzamiento de la película en Cannes en las fiestas y entre las estrellas como Del Toro a quién considera una persona «increíblemente modesta»
Después de su rol para la serie de Universal, que lo situó entre los 50 más bellos de la revista People («son cosas externas a las que no hay que darles importancia, mi vida sigue igual» dice) los rumores de la industria lo situaban como Aquaman en la versión fílmica de La Liga de la Justicia, un proyecto por ahora en suspenso por culpa de la crisis. «No es algo que se ve en el futuro muy cercano. Si algún día el mismo proyecto se llegara a armar de nuevo, de ahí somos», dice en buen chileno.
