Sánchez ha presentado un plan para reducir a la mitad la tasa de desempleo, en la actualidad del 20,9 por ciento, durante su gestión y también se ha comprometido a recortar el gasto público y luchar contra la corrupción. Además de la propuesta de auditoría de costes a las eléctricas, Sánchez también propone garantizar el cierre de las centrales nucleares al término de su vida útil, de 40 años, y quiere prohibir las actividades de fracking.
Las eléctricas españolas como Iberdrola SA y Endesa SA se enfrentarían a una auditoría de costes si el partido socialista gana el suficiente apoyo de otros grupos políticos para poder formar un nuevo gobierno.
La auditoría de costes de las eléctricas formaría parte de una reforma más amplia del sector, según un documento que contiene las propuestas del partido socialista para las negociaciones con otros grupos. Los hogares españoles pagan unos precios por electricidad y gas superiores a la media de la Unión Europea, según datos de Eurostat.
El líder socialista Pedro Sánchez ha comenzado las negociaciones con otros partidos, entre ellos el partido promercado Ciudadanos, lo que dejaría fuera del gobierno al actual presidente en funciones Mariano Rajoy. Sánchez está dispuesto a negociar con un amplio espectro de partidos en un intento por conseguir apoyo para sus propuestas de recorte del gasto y reducción del desempleo.
“Tenemos que consolidar la recuperación económica, tenemos que crear buen empleo, tenemos también que reconstruir el estado de bienestar, tenemos que luchar contra la desigualdad y tenemos también que luchar contra la corrupción y regenerar la vida democrática en nuestro país”, dijo Sánchez en una entrevista radiofónica con Radio Nacional de España el lunes. “Esos son los elementos centrales de la propuesta que vamos a poner sobre la mesa al resto de formaciones políticas”.
El rey de España Felipe VI invitó a Sánchez a explorar opciones para formar gobierno la semana pasada después de que Rajoy manifestase que no tenía suficiente apoyo en el Congreso para seguir al frente del Ejecutivo.
Sánchez ha presentado un plan para reducir a la mitad la tasa de desempleo, en la actualidad del 20,9 por ciento, durante su gestión y también se ha comprometido a recortar el gasto público y luchar contra la corrupción. Además de la propuesta de auditoría de costes a las eléctricas, Sánchez también propone garantizar el cierre de las centrales nucleares al término de su vida útil, de 40 años, y quiere prohibir las actividades de fracking.
El déficit del sector eléctrico del país se disparó tras la política de subsidios a productores de energías renovables del predecesor de Sánchez en el Partido Socialista, José Luis Rodríguez Zapatero. Rajoy consiguió frenar el denominado déficit de tarifa del sector eléctrico al recortar los subsidios, lo que indignó a los inversores de energías renovables.
El documento de negociación consta de siete capítulos que detallan el abanico de propuestas de gobierno de Sánchez. Entre sus prioridades se incluyen la renegociación de las metas de déficit presupuestario de España con Europa, la mejora del sistema educativo y la lucha contra la corrupción. Los socialistas también quieren frenar la práctica en la que cargos del Gobierno ocupan puestos en empresas altamente reguladas por el Estado, como las de telecomunicaciones y eléctricas.
Sánchez de inmediato tuvo una disputa con el partido antiausteridad Podemos cuando dijo el lunes que Trinidad Jiménez, ex ministra de Asuntos Exteriores durante el gobierno de Zapatero, aceptaría un puesto en la operadora Telefónica SA cuatro años después de abandonar su cargo. Los socialistas han propuesto un período de incompatibilidad de cinco años antes de que ex funcionarios del Gobierno puedan aceptar puestos en empresas.
