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Andrónico Luksic abre la billetera en negociación colectiva de Canal 13 y así evita el fantasma de la reforma laboral Factores que motivaron a la estación de TV adelantar las negociaciones con el sindicato

Andrónico Luksic abre la billetera en negociación colectiva de Canal 13 y así evita el fantasma de la reforma laboral

Luisa Navea
Por : Luisa Navea Periodista El Mostrador Mercados
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En un inédito acuerdo, la estación televisiva apretó el acelerador y zanjó el tema laboral con seis meses de anticipación con un jugoso bono de término de conflicto de $2.500.000 por cada uno de los 945 trabajadores de planta. La idea era evitar el riesgo de quedar sin señal ante la definición de los servicios mínimos y verse obligados a negociar a cada momento con el sindicato por la extensión de beneficios de trabajadores nuevos o no sindicalizados. Punto de quiebre que incluso se vivió en esta última negociación, según relata el asesor jurídico, Luis Lizama, quien llevó adelante la negociación. Los despidos de unos 60 funcionarios, entre octubre y noviembre del año pasado, habían contaminado el ambiente laboral.


“Papito corazón”. Así le dicen al menos dos dirigentes sindicales de Canal 13, al controlador de la estación televisiva, Andrónico Luksic, después de una inédita negociación colectiva en que los trabajadores recibieron jugosos bonos y soluciones a una cadena de peticiones históricas.

A cambio, la estación de Luksic se evitó dar la pelea por la dotación de servicios mínimos en caso de votarse una huelga y de bancarse una seguidilla de negociaciones con el sindicato por extensión de beneficios del nuevo trabajador.

En ese escenario, la orden del presidente del directorio de Canal 13, René Cortazar y de la directora ejecutiva, Alejandra Pérez, fue clara y directa. “Hay que explorar”, llegar a acuerdo antes de la negociación oficial que comenzaba en noviembre, cuentan desde la estación televisiva.

La invitación extendida por la empresa a negociar en forma no reglada fue tomada con sorpresa por parte de la dirigencia sindical. Los despidos de unos 60 funcionarios, entre octubre y noviembre del año pasado, habían contaminado el ambiente laboral. Pero tanto los trabajadores como la empresa estaban dispuestos a dialogar.

“Ese fue el punto de partida: disposición de ambas partes de buscar esta solución”, cuenta el asesor jurídico de Canal 13, Luis Lizama, quien llevó adelante la inédita negociación.

A fines de abril se constituyó la primera mesa de trabajo en la cual se estableció un cronograma para acercar posiciones, con miras a concretar los acuerdos el 29 de mayo. Aunque la negociación se selló una semana después.

“Ambas partes teníamos claro que negociábamos voluntariamente en esta fecha con mayor libertad, ya que de hacerlo después tendría que ser con una ley nueva, de la cual no teníamos claros sus efectos”, precisa el abogado laboralista.

A ello se sumaba un factor adicional: el miedo por los resultados de adhesión colectiva y de servicios mínimos de las otras estaciones televisivas: Mega y Chilevisión, cuentan fuentes de la industria.

En el caso de Canal 13, la estación desconocía qué acordarían los trabajadores en materia de servicios mínimos y se cuestionaban si tendrían la posibilidad de tener una cuadrilla de emergencia para poner la señal en pantalla, en el caso de llegar a huelga.

En ese contexto, el sindicato puso en la mesa 23 puntos a tratar y la mayoría de sus ítems les fueron concedidos en el convenio colectivo que entra en vigencia el 1 de enero de 2018 y que dura hasta el 31 de diciembre de 2020.

Así, a los trabajadores se les respetó lo acordado en la última negociación y desde ese piso comenzaron a negociar mejorando lo conquistado en negociaciones pasadas tanto el bono por término de las negociaciones y del reajuste salarial. Entre los beneficios obtenidos por los 945 trabajadores de planta, de los cuales 723 están sindicalizados (77%), figuran: Un bono de $53.609 diarios por eventos extraordinarios o excepcionales, un bono nocturno de 0,49 UF ($14.000) para quienes estén sujetos a horario, un bono de vacaciones de 1,5 UF ($40.000), con 1 UF ($26.657) adicional para quienes estén al día en sus vacaciones –no acumulen-. Además del bono de término de negociaciones de $2.500.000, un reajuste salarial de $55.000 ($15 mil más que la negociación de hace tres años) para las personas que ganan hasta $1.500.000 y $30.000 para quienes obtienen hasta $2 millones, y el esperado bono marzo de 2,5 UF ($66.642). El sueldo mínimo en la estación de Luksic quedó fijado en $500.000.

La empresa logró un acuerdo colectivo con sus trabajadores en forma no reglada., que nunca lo había hecho, cuenta el también socio de Lizama y Cía, quien lleva las negociaciones colectivas de Codelco, Antofagasta Minerals, Anglo American, Banco de Chile y Entel.

“La ganancia para el canal es total. Generaste un clima de confianza, restableciste una relación laboral, además creamos un comité bipartito de seguimiento de la negociación colectiva. De todo punto de vista, ambas partes ganamos”, subraya.

Pero además el canal se zafó de dos espinas que trae consigo la reforma laboral: la definición de servicios mínimos en caso de huelga y la extensión de beneficios a trabajadores nuevos y los no sindicalizados, ya que esté punto quedó zanjado acordando ambas partes extender los beneficios a los 945 trabajadores. Esta es una de las ventanas que la reforma laboral dejó abierta al permitir que los sindicatos puedan negociar en cualquier momento por los trabajadores no afectos a los contratos colectivos y que afectaría principalmente a las empresas con alta rotación de personal.

De hecho, ese fue el punto de quiebre en la negociación en Canal 13 de este año, según reconocen ambas partes. Los dirigentes sindicales no estaban de acuerdo en un comienzo con extenderle los beneficios logrados en el convenio colectivo a los 222 trabajadores no sindicalizados, pero después se llegó a un acuerdo que dejó conforme a ambas partes. Este consistió en autorizarse mutuamente. El sindicato visó a la empresa a aplicar el contrato colectivo a los trabajadores sin afiliación sindical y la empresa autorizó al sindicato a extender los beneficios a los nuevos socios del gremio.

“Acordamos que el trabajador no sindicalizado pagaría el 100% de la cuota al sindicato y ahí el tema quedó definitivamente zanjado. Dejamos las cosas neutrales: ni se incentiva a que ellos sean parte del sindicato y tampoco se les desmotiva”, precisa Lizama.

El representante de Canal 13 ante los trabajadores precisa que fue importante para el personal negociar de esta manera porque además existían temas pendientes; ítems históricos del canal, entre los que figuraba el reconocimiento de la antigüedad de quienes habían trabajado con contratos temporales y la condonación parcial de préstamos a trabajadores más antiguos.

“La reforma laboral finalmente obligó a las partes a llegar a un acuerdo. El mejor antídoto es tener relaciones laborales buenas con los sindicatos, negociar colectivamente en forma voluntaria y no reglada…Eso es lo mejor”, concluye Lizama, quien también estará al frente de las negociaciones del Grupo Luksic en la minera Zaldívar y que se enfrentará al laboralista, Marco López, quien representó a los trabajadores en la huelga de minera Escondida.

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