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George W. Bush envía a Rice y Gates a Moscú para tratar con pares rusos

Entre los asuntos a tratar se encontrarán no sólo el programa nuclear iraní, sino también la lucha contra el terrorismo y el escudo antimisiles que Estados Unidos pretende desplegar en Europa del Este.


El presidente de EE.UU., George W. Bush, enviará la semana próxima a Moscú a sus secretarios de Estado, Condoleezza Rice, y de Defensa, Robert Gates, para que aborden con sus pares rusos asuntos como el programa nuclear iraní.



La portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino, afirmó este miércoles en su rueda de prensa diaria que Bush «ha pedido a los secretarios Rice y Gates que viajen a Moscú los días 17 y 18 para conversaciones dos a dos con sus colegas rusos».



Entre los asuntos a tratar se encontrarán no sólo el programa nuclear iraní, sino también la lucha contra el terrorismo y el escudo antimisiles que Estados Unidos pretende desplegar en Europa del Este, explicó Perino.



También podrían abordarse temas candentes como la reciente independencia de Kosovo o la situación en Oriente Medio.



El viaje se decidió durante una conversación telefónica el viernes pasado entre Bush y el presidente saliente ruso, Vladímir Putin, que consideraron la visita «una buena idea».



El pasado octubre ya se celebraron conversaciones similares ruso-estadounidenses, aunque entonces Rice y Gates no consiguieron llegar a un acuerdo con sus colegas de Moscú sobre el escudo antimisiles o las medidas a tomar para que Irán renuncie a su programa atómico.



Las relaciones entre Washington y Moscú atraviesan por una etapa de enfriamiento, exacerbada en los últimos meses por el desacuerdo acerca de ese escudo.



El gobierno de Estados Unidos defiende el plan con el argumento de que el sistema es imprescindible para proteger al país y a sus aliados europeos de posibles ataques de estados hostiles.



Este proyecto ha sido fuente de fricción con Rusia, cuyo presidente se encuentra tajantemente opuesto al plan al considerar que se trata de una amenaza a la seguridad de su país.



Rusia ha amenazado incluso con apuntar sus misiles hacia Polonia y la República Checa si el plan se materializa.



Pese a las fricciones, Moscú mantiene su colaboración con Washington en lo que respecta al programa nuclear iraní y la semana pasada dio su visto bueno en el Consejo de Seguridad de la ONU a la imposición de nuevas sanciones contra Teherán.



EFE

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