Falta confianza y empatía. Confianza en que nuestros profesores trabajan a diario para que sus estudiantes tengan las mejores oportunidades. Empatía, con las precarias condiciones laborales en las cuales día a día y año tras año llevan a cabo la labor más importante de todas: formar a nuestros niños.
Por la urgente necesidad de cambiar las actuales condiciones de enseñanza, llamamos a que el proyecto de ley de carrera docente no sea ser retirado del Congreso. Es en esta tribuna pública donde hoy está la oportunidad de construir una carrera docente que confíe y empatice con los profesores, y es hoy cuando tenemos que hacernos cargo de esta oportunidad histórica: los ojos del país están en la sala de clases y en sus profesores.
Apelamos a la reanudación del diálogo para no enfrentarnos a dificultades legislativas y de presupuesto que se derivarían de un retiro, perdiendo la instancia de generar las condiciones que nuestros estudiantes y profesores merecen.
Compartimos con los profesores muchas de sus demandas, las que creemos también pueden desprenderse de los principios declarados en el proyecto de ley, el que necesita mejoras profundas en su articulado.
Principios claves que requieren un mayor esfuerzo por parte del gobierno:
1) Necesidad de generar una carrera que realmente atraiga y retenga a jóvenes con talento y vocación en la educación pública.
2) Generar más y mejores espacios de formación y colaboración entre pares en la propia escuela, para lo cual es necesario el aumento y redefinición de las horas no lectivas junto con evaluaciones locales de carácter formativo.
3) Reconocimiento, incentivos y mayor apoyo al desempeño en sectores vulnerables.
Tuvimos el privilegio de compartir junto a profesores y estudiantes, viviendo a diario las condiciones y desafíos de enseñar en contextos difíciles y bajo condiciones laborales adversas. Desde esta experiencia limitada de dos años, levantamos la voz para decir que confiamos y empatizamos con nuestros profesores, pues muchas de sus demandas son condiciones mínimas para alcanzar mayores estándares de calidad y equidad en el sistema.
Los estudiantes ya no pueden esperar, necesitan profesores que cuenten con garantías de dignidad laboral.
El futuro es hoy y debemos trabajar juntos, más que nunca, para mejorarlo.
Grupo de Políticas Públicas
Alumni Enseña Chile
