Mandatario asistirá junto a Bachelet a cita en La Habana
También viajarán a Cuba el ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno, y el futuro canciller Heraldo Muñoz. El jefe de Estado había declinado hace algunos días participar en la cita ante la posibilidad de un conflicto político interno tras el dictamen de La Haya. Pero los alcances de la resolución y el hecho de que la oposición cerrara filas con el gobierno en esta materia, le dejó el camino libre para concurrir al encuentro, que aparece como el escenario propicio para la primera reunión bilateral con su par peruano tras conocerse el dictamen. [Actualizada]
Aunque las primeras semanas de enero casi se había descartado la posibilidad de asistir a la Cumbre en La Habana, La Moneda optó por un giro en sus señales diplomáticas. El Presidente Sebastián Piñera asistirá finalmente a la reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), acompañado de la Mandataria electa, Michelle Bachelet. La decisión se terminó de zanjar esta tarde en Palacio, tras una reunión de una hora de ambos con sus respectivos cancilleres, Alfredo Moreno y Heraldo Muñoz, respectivamente.
El propio Piñera había anunciado hace algunos días que no concurriría al encuentro internacional ante la posibilidad de un conflicto político interno tras el dictamen de la Corte Internacional de Justicia que zanjó la delimitación marítima con Perú. Sin embargo, los alcances de la resolución y el hecho de que la oposición cerrara filas con el gobierno en esta materia, le dejó el camino libre para concurrir al encuentro, para posiblemente sostener la primera cita bilateral con su par peruano tras el pronunciamiento de La Haya, que reconoció a Chile el límite territorial del Hito 1, pero que redujo a 80 millas marinas la Zona Económica Exclusiva.
Durante el día, se comenzaron a entregar las respectivas visas para ingresar a la Isla a la prensa que se acreditó para dicha gira, documentos que estaban listos hace más de quince días, pero que no habían sido repartidos, ya que La Moneda tenía informalmente descartada la opción de ir a Cuba.
En forma paralela, el avión FACH se encuentra desde ahora listo para despegar, aunque desde la sede de gobierno confirmaron que, si bien no hay hora definida, la delegación partirá definitivamente mañana martes.
El canciller Moreno informó oficialmente del viaje y que la delegación partirá mañana en la noche, después de la sesión especial que realizará la Cámara de Diputados para analizar la sentencia. Con este itinerario, la delegación estará todo el día 29 en La Habana, que corresponde a la segunda jornada y clausura de la cumbre.
Agregó que, además de Piñera y Bachelet, también irá en la delegación el próximo ministro de RR.EE.
A las 15:50 Bachelet llegó a La Moneda junto a Muñoz para reunirse con Piñera. Ya durante la cita se comentaba en palacio que la Mandataria electa asistiría a la gira si el Presidente resolvía viajar.
La CELAC es un organismo que reúne a mandatarios de todos los países de América Latina, por tanto, en dicha cita estará el Presidente de Perú, Ollanta Humala, quien parte rumbo a la isla a la 1:00 de la mañana. Un escenario propicio para realizar un primer encuentro entre ambos.
Al respecto, Moreno dijo que «los dos Presidentes (Piñera y Humala) y Michelle Bachelet se encontrarán en Cuba. Ahí tendrán la oportunidad de conversar».
Previo a la reunión Piñera-Bachelet, el tema de la CELAC también fue abordado en el encuentro que se hizo en La Moneda para analizar el contenido del fallo de la Corte Internacional de Justicia. En la cita, estuvieron los presidentes del Senado, Jorge Pizarro, de la Cámara de Diputados, Edmundo Eluchans, los parlamentarios de las comisiones de Relaciones Exteriores de las dos ramas del Congreso y la mayoría de los timoneles de partido.
En esa cita, el Mandatario habría consultado la opinión de los asistentes sobre participar en la Cumbre de La Habana en estos momentos. Trascendió que fue mayoritaria la opinión de que era necesario que viajara, porque si Humala estaba solo en el foro internacional y Piñera se quedaba en Santiago, era una señal de derrota que no corresponde al tenor de la sentencia.
